Como inmigrante en los Estados Unidos, ha sido de gran importancia mejorar mi vida de cualquier manera que estuviera a mi alcance, aprovechar cualquier oportunidad de mejora de vida que pudiera encontrar y que pudiera educarme. Siempre he sabido el poder de tener y mostrar una actitud de agradecimiento, y mi vida personal, así como mi vida profesional, son un reflejo de ello. Recientemente, tuve la increíble oportunidad de asistir a un evento que no solo me alentó a seguir siendo agradecido, sino que me ayudó a arraigar aún más mis ideas sobre las verdades acerca del éxito y el ser agradecido. Estas herramientas ya le han dado calidad a mi vida de formas increíbles y poder asistir a este evento renovó mi convicción y dedicación al hecho de que si no hay una actitud de agradecimiento que se refleja en nuestro estilo de vida y conducta, el verdadero éxito seguirá estando fuera de nuestro alcance.

El evento al que asistí fue organizado por el Consejo de Arte y Comercio de la Zona Metropolitana de Filadelfia y su tema principal fue el libro llamado "Thrive" (Progresar) de Ariana Huffington. Uno de los principales puntos de debate del evento fue un aspecto particular del libro que explicaba el poder de dar gracias y mostrar gratitud y las formas en las que puede afectar, y afectará, cada aspecto de su vida, a nivel personal y también profesional. Si bien me complace saber que comprendo lo cierto que es que mostrar gratitud y dar gracias pueden afectar de manera positiva nuestras vidas, es muy alentador escuchar estas ideas reforzadas por quienes han aprendido esta lección y la han aplicado a sus propias vidas de manera regular, experimentando el éxito perpetuo y el goce de dar gracias, dos aspectos que juntos completan la esencia del ser humano. Aunque ya sabía que dar gracias es más que simples palabras dichas de manera displicente y que dar gracias es un verbo que puede, y debe, incluir y dar motivación a nuestras acciones e influenciar profundamente nuestros estilos de vida en formas que van más allá de lo que nos podamos imaginar, este concepto se ha hecho incluso más real por esta vivencia de poder escuchar hablar sobre los mismos principios y el efecto positivo que puede tener no solo en la vida en general, sino en el éxito del individuo que los practica. Estos testimonios solamente han sido suficientes para reiterar la necesidad de estar agradecido en todos los aspectos de mi vida y demostrar ese agradecimiento. Esto garantizará el éxito como ser humano y como profesional. 

Las formas en las que he practicado esto personalmente y que han sido exitosas incluyen demostrar mi gratitud por las cosas que tengo o las personas que conozco o los éxitos que tengo. Mi experiencia y los resultados me han ayudado a encontrar un lugar de verdadera humildad dentro de mi ser. Una forma de practicar este agradecimiento es a través de actos de servicio a los demás. Sin importar si son menos afortunados que nosotros o si simplemente necesitan a alguien que los escuche, al ser una persona predispuesta y con un corazón agradecido, colocamos nuestras propias vidas en una perspectiva que es verdadera y clara. Esto nos permite experimentar un agradecimiento perpetuo que puede demostrarse de otras maneras. Compartir nuestro tiempo y energía personal, algo que hoy en día es tan importante para nosotros, a su vez nos permite "ampliar las fronteras de nuestro ser", tal como elocuentemente lo señala la Sra. Huffington. Ya no habrá espacio para estar atrapados en la estrechez de nuestra propia futilidad. Resulta imposible cuando damos y mostramos nuestro agradecimiento activamente a través del servicio a los demás.

Es muy importante reiterar la idea de que la esencia de dar gracias es dar y punto. Se trata de "mostrar" aprecio. Decirlo es muy importante pero mostrarlo es fundamental porque, como todos sabemos, un hecho dice más que mil palabras. Cuando logro dejar de prestarle atención a todo lo que he hecho, o pienso que he hecho, y comienzo a prestar atención a las necesidades de los demás, mi propia existencia egoísta tiende a empequeñecerse por dicho sacrificio. Solo entonces uno puede colocarse a sí mismo y a su propia vida y sus problemas en el lugar adecuado. Este único acto es lo que nos permite entregarnos a los demás libremente en agradecimiento por lo que tenemos y por el bien de servir a otros seres humanos. Cuando practicamos esto en nuestra vida personal, también se verán afectados cada uno de los demás aspectos de nuestra vida desde el trabajo, la familia, hasta nuestras relaciones con nosotros mismos. Ser agradecido también fortalecerá sus relaciones interpersonales en la vida y atraerá a las personas adecuadas para que pueda mantener la mentalidad saludable que tanto se esfuerza por tener.

En esencia, el poder de dar gracias es una fuerza que consiste en algo más que decir vagamente unas palabras. Dar gracias con el pensamiento, la palabra y nuestros actos nos ayudará a consolidar nuestro sentido de integridad y honestidad. Infundirá un sólido cimiento de humildad y nos permitirá servir a otros sin sentimientos de culpa ni obligación. En mi caso, como inmigrante, sé cuán efectivo es dar las gracias no solo para afianzar una mentalidad de gratitud en mi vida, sino que me ha permitido establecer una red sólida de relaciones y conexiones personales en las que puedo confiar y de las que puedo depender. Es tan simple como incorporar el dar las gracias a mi modo de razonamiento y estilo de vida. Cambiará su vida también.