El pasado domingo, la senadora de Minnesota Amy Klobuchar se convirtió en la última demócrata en lanzar su sombrero al ruedo para una candidatura presidencial en 2020.

Hablando en medio de las nevadas de Boom Island en Minneapolis, Klobuchar se apoyó con fuerza en sus raíces del medio oeste, refiriéndose al río Mississippi como una metáfora de sus raíces en el "corazón" de Estados Unidos, lo que tal vez le otorgue una posición única a la candidata a la hora de abordar la profunda división que el país está experimentando hoy.

"Así que hoy, en una isla en medio del poderoso Mississippi, en el corazón de nuestra nación, en un momento en que debemos sanar el corazón de nuestra democracia y renovar nuestro compromiso con el bien común, estoy ante ustedes como la nieta de un minero, hija de un maestro y periodista, la primera mujer elegida al Senado de los Estados Unidos por el estado de Minnesota, para anunciar mi candidatura a la presidencia de los Estados Unidos", dijo Klobuchar a la multitud de simpatizantes que desafiaban las frías temperaturas.

Klobuchar ha emergido de una convincente victoria durante las elecciones de mitad de período de noviembre, en las que fue reelecta con más del 60 por ciento de los votos. Su resultado, y particularmente su desempeño en los condados rurales de Minnesota, provocaron de inmediato la especulación de que podría transformarse en una oponente formidable para el presidente Trump en 2020.

Klobuchar, una fiscal de oficio, trae consigo credenciales más moderadas que muchos de los otros candidatos demócratas que ya han declarado sus candidaturas presidenciales.

Se ha mantenido en silencio sobre temas como Medicare para todos, colegios sin costo de matrícula y un salario mínimo de $ 15, según Vox, asuntos cada vez más populares en el Partido Demócrata.

El domingo, la candidata habló sobre la interrupción causada por las nuevas tecnologías en la fuerza laboral y prometió enfrentar a las grandes compañías tecnológicas. Abordó el cambio climático y prometió "restablecer las normas de energía limpia y los estándares de consumo de combustible y establecer una legislación general para invertir en empleos verdes e infraestructura" durante los primeros 100 días de su presidencia.

Asimismo, y en cuanto a la atención médica, Klobuchar dijo que el país debe avanzar hacia la atención médica universal y trabajar para reducir el costo de los medicamentos recetados.

Mientras tanto, la senadora ya se ha visto obligada a abordar críticas que describen el supuesto maltrato que su personal ha recibido en el pasado.

Al preguntársele sobre esto el lunes, dijo: "Soy fuerte, presiono a la gente, eso es cierto, pero mi punto es que tengo muchas expectativas para mí, tengo altas expectativas para las personas que trabajan para mí y tengo altas expectativas para este país".

Con su anuncio del domingo, Klobuchar se convirtió en la quinta mujer en ingresar a la carrera en el lado demócrata.

Es probable que la senadora de Minnesota tenga los ojos puestos en hacer un gran revuelo desde el principio en el estado fronterizo de Iowa, que celebrará sus asambleas en menos de un año a partir de ahora.