El 11 de julio de 2021, miles de cubanos salieron a las calles para protestar y criticar abiertamente la mala gestión del gobierno en el país que había sido asolado por la pandemia. Ante la falta de alimentos, medicinas, electricidad y esperanza, los cubanos lucharon para denunciar a los funcionarios y exigir mayores libertades civiles. Lo que siguió fue una represión masiva por parte del gobierno que supuso el arresto y el procesamiento de cientos de personas y la detención de 1.000 manifestantes pacíficos. 

Según la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos, más de 140.000 cubanos han abandonado la isla desde el pasado mes de octubre hasta este mayo reciente. Esta cifra es superior a la del último éxodo masivo de la isla, que tuvo lugar durante el éxodo del Mariel en 1980, en medio de otra crisis económica. Durante esa migración masiva, unos 125.000 cubanos llegaron a Estados Unidos.

La máxima preocupación de Cuba ha sido siempre el levantamiento y la revuelta del pueblo contra el gobierno comunista que tiene asfixiada a la nación desde hace más de medio siglo. Temiendo perder el control sobre su pueblo, como un matón, el gobierno contraatacó injustamente, llegando a culpar a Estados Unidos de orquestar las manifestaciones. 

El pueblo cubano no volcó los coches ni saqueó ninguna tienda gestionada por el gobierno. A pesar de ello, cientos de personas fueron detenidas, procesadas y encarceladas con penas de hasta 25 años, por cargos como sedición, sabotaje, robo con fuerza y desorden público. Según funcionarios del gobierno cubano, unos 488 ciudadanos fueron sancionados, 383 fueron condenados a prisión, 105 fueron sancionados sin prisión y dos personas fueron liberadas sin ser acusadas. 

Justicia11J, un grupo de derechos humanos, niega las cifras del gobierno y las eleva, afirmando que el número de detenidos es mucho mayor de lo que se informó. Afirman que 701 cubanos siguen detenidos, de los cuales 622 tienen una condena de 25 años. 

Toda una población está fatigada por la incertidumbre que parece afrontar siempre la solitaria isla. La inflación y la falta de cualquier tipo de recursos tienen al país en un lugar interesante, ya que más gente que nunca se está yendo en masa. 

En los últimos años, Cuba ha vivido algunos de sus momentos más duros en medio de la pandemia, que obligó a cerrar su frontera durante ocho meses, paralizando su economía. El turismo, una de las mayores fuentes de ingresos del país, se redujo en más de un 70%, según Pavel Vidal, antiguo economista del banco central cubano, que enseña en la Universidad Javeriana de Colombia. 

Junto con las consecuencias de la pandemia, uno de los pocos aliados de Cuba, Venezuela, se vio envuelto en una mayor agitación política y económica y se vio obligado a recortar la ayuda que siempre suministraba a Cuba. 

Otra importante fuente de ingresos que sufrió un golpe fue su programa de intercambio médico que permitía al personal médico cubano ir al extranjero, a América Latina, África y Oceanía, para llevar a estudiantes y pacientes a estudiar y recibir tratamiento. Sin embargo, varios países han terminado desde entonces sus acuerdos con Cuba.

El ex presidente estadounidense Donald Trump tampoco ayudó a las cosas, imponiendo restricciones a la importación de petróleo del país y reduciendo el número de vuelos y barcos estadounidenses que podían atracar allí, cortando efectivamente los lazos con Cuba. 

Para un país que importa más del 70% de sus alimentos de otros países, según el Programa Mundial de Alimentos, el gobierno ha tenido dificultades para alimentar a su pueblo y suministrar medicamentos, ya que muchos niños y ancianos murieron durante la pandemia debido a la escasez. 

En el año transcurrido desde las protestas iniciales, el gobierno cubano se ha esforzado por resolver los problemas de la población, pero en última instancia, muchos creen que se avecina otra gran protesta como la de 2021, ya que no ha cambiado mucho la situación de nadie. 

Cientos de personas están encarceladas injustamente, muchas pasan hambre y no tienen electricidad.