El Concejo municipal de Tucson, Arizona, aprobó hoy una resolución en contra de la construcción de un muro en la frontera con México, con una cláusula que permitiría en ciertos casos a la ciudad no hacer negocios con compañías involucradas en el proyecto propuesto por el presidente Donald Trump.

"Estamos expresando la intención de no invertir en compañías que diseñen, construyan o financien de alguna forma el muro en la frontera EE.UU-México", comentó Regina Romero, vicealcalde de la Ciudad de Tucson y miembro del concejo.

"Esta cláusula es importante porque no solo es suficiente decir que estamos en contra del muro, sino es enviar un claro mensaje que no vamos a tolerar las compañías que están haciendo dinero construyendo el muro", señaló.

La medida que fue aprobada por unanimidad otorga el derecho a la ciudad de invertir fondos y otorgar contratos representando los deseos de las comunidades, pero sin entorpecer proyectos que beneficien las relaciones comerciales entre ambos países.

Cada inversión será analizada independientemente.

"Nosotros quisimos ir un paso más adelante, el muro será demasiado dañino no solo para la gente, sino también para los animales que puedan estar en peligro de extinción, por eso no queremos apoyar a compañías que participen en la construcción del muro", enfatizo Romero.

Reconoció que existe cierta oposición en contra de esta cláusula en particular, pero cree que es importante "practicar lo que se declara" y tomar una fuerte postura para enviar un mensaje claro a la administración Trump.

Organizaciones que defienden el medio ambiente, inmigrantes y representantes de las reservas indígenas del estado apoyaron la iniciativa.

Una moción similar en contra de la construcción del muro fronterizo fue aprobada hoy también por la junta de Supervisores del condado Pima, sin la cláusula en contra de los negocios que participen en el proyecto.

 El pasado 4 de junio, medio centenar de personas provenientes de diferentes partes de Estados Unidos, México y Centroamérica participaron en la Caminata del Migrante, que recorre la misma ruta utilizada por los inmigrantes indocumentados para cruzar la frontera a través del desierto de Arizona.

Los participantes hicieron un llamado a la administración del Presidente Donald Trump para frenar políticas migratorias que en su opinión fomentan las muertes a lo largo de la línea fronteriza.

De acuerdo a los organizadores, desde 1990 más de 7.000 inmigrantes indocumentados, hombres, mujeres y niños, han perdido la vida cruzando la frontera de los Estados Unidos y México, mientras que otros 2.700 han sido reportados como desaparecidos.

De acuerdo a cifras de la Oficina del Médico Forense del Condado Pima, en el sur de Arizona, durante el presente año fiscal ya se han recuperado 74 cuerpos de inmigrantes indocumentados en el desierto de Arizona.