A pesar de haber sido analista legal y miembro del equipo del New Yorker durante mucho tiempo, y de haber escrito numerosos libros, este abogado formado en Harvard no tiene experiencia en el periodismo del día a día. Así que no tiene ningún sentido que dedique su tiempo a intentar definirlo. 

 Por mi parte, bueno, después de casi 30 años escribiendo en periódicos, presentando programas de radio y haciendo de opinador en televisión, sí que me he formado una idea de lo que es el periodismo. 

 En lugar de hacer lo que se le paga por hacer - por ejemplo, opinar sobre legislación - Toobin dedica demasiado de su tiempo frente a las cámaras a criticar a la administración y ondear los colores de su partido. 

 Durante una aparición reciente en CNN, Toobin atacó a Fox News por conceder “condiciones extremadamente favorables” a la Casa Blanca. Fue especialmente crítico con el exitoso programa matutino “Fox & Friends” - que habitualmente supera los programas de CNN y del resto de sus competidores de televisión por cable. 

Para poner toda la información sobre la mesa: yo soy un ex colaborador de CNN cuyo rostro apareció en la cadena durante más de 20 años, y que hoy resulta que aparece a menudo en Fox News. 

Toobin sugirió que la popularidad del programa matutino de la Fox se basa en su “acceso al presidente” y que no es “periodismo real”.  

 Muy enriquecedor, viniendo de alguien que trabaja para CNN, una televisión que ha perdido el norte desde que Trump asumió el poder y cuya única misión hoy en día parece ser derribar al presidente. 

 Se trataría de un objetivo muy noble, en el caso de que estuviésemos hablando del partido Demócrata o de activistas liberales. Pero no es un rol que pertoque a  los periodistas, quienes supuestamente trabajan para encontrar la verdad, y no para liderar la resistencia. Es asombroso que - como trabajador de la CNN - Toobin tenga la audacia de menospreciar cualquier visión sobre el periodismo diferente de la suya, ya que justamente esta cadena ha hecho mucho más que cometer errores desde que Trump entró en el campo de batalla.  

 Cualquier observador de medios de comunicación podría confirmarle que la CNN ha estado dando tumbos en los últimos años. De hecho, podría argumentarse que no hay otra cadena que haya hecho más por reducir la credibilidad pública de los medios de comunicación que CNN. 

 Empecemos por la cumbre: el presidente de la CNN, Jeff Zucker, es la misma persona que, mientras era presidente de NBC Entretainment,  introdujo a Trump en millones de hogares americanos gracias a su programa estrella “The Apprentice”. Prácticamente, desde el primer momento en que Trump puso un pie en política, el republicano ha hostigado a la CNN,a Zucker y al resto de periodistas y presentadores, en muchos casos, por su nombre y apellidos. En respuesta, las personalidades estrella de la CNN han hecho poco por ocultar su desprecio por Trump. Notícia de última hora: las agendas individuales interfieren en la práctica del buen periodismo. 

 En el  imperio de errores cometidos por CNN, se incluyen: 

 -- Ocho periodistas, presentadores y ejecutivos que en abril de 2015 atendieron a una cena off-the-record en la residencia de Joel Berenson, estratega jefe de la campaña de Hillary Clinton, en Nueva York, dos días antes de que la futura nominada a la presidencia por el partido Demócrata anunciase su candidatura. Fue una reunión mantenida en secreto, que nadie reportó o confirmó hasta que fue revelada por WikiLeaks. 

-- Aprovecharse, en enero de 2017, de una historia no confirmada de BuzzFeed sobre un expediente espinoso compilado por un ex espía británico que alegaba que los rusos tenían material incriminatorio, incluida la afirmación no verificada de que Trump se entretenía con prostitutas en Moscú. Brian Stelter, presentador de programa  “Reliable Sources” (“Fuentes fiables”) de CNN, en un momento dado recriminó al editor de BuzzFeed Ben Smith por publicar la historia. Stelter no mencionó que CNN fue la primera en informar sobre la existencia del dossier.

-- Varios meses más tarde, el colaborador de la CNN Van Jones fue filmado por una cámara oculta de Project Veritas declarando que “el tema de Rusia es solo otra gran hamburguesa vacía”.  Después de numerosas llamadas exigiendo que Jones fuera despedido por haber colaborado en sobrecalentar esa hamburguesa vacía,insistiendo en los detalles de la historia, el departamento de relaciones públicas de CNN publicó un comunicado alegando que la cadena valora las diferencias de opiniones y que justamente “la diversidad de opiniones personales es lo que hace fuerte a la CNN”. 

- Tener que retractarse, más adelante, por un artículo publicado en CNN.com sin las fuentes apropiadas. El artículo afirmaba incorrectamente que los investigadores del Senado estaban examinando una reunión entre el financiero de Wall Street Anthony Scaramucci, que era miembro del equipo de transición de Trump, y un ejecutivo del Fondo Ruso de Inversión Directa, un fondo de 10 mil millones de dólares que invierte en empresas rusas. CNN fue amenazada con una demanda de 100 millones de dólares. Tres periodistas de CNN responsables de publicar la historia dimitieron.

¿Es esto lo que Jeffrey Toobin, soldado fiel de la CNN desde 2002, considera periodismo real? Si es así, ¿por qué deberíamos tomarnos en serio lo que opine este analista legal sobre cualquier cosa?