LIVE STREAMING
SUNLAND PARK, NM - 1 DE JUNIO: los equipos de construcción de We Build The Wall Inc.trabajan el 1 de junio de 2019 en Sunland Park, Nuevo México. (Foto de Joe Raedle/Getty Images)
SUNLAND PARK, NM - 1 DE JUNIO: los equipos de construcción de We Build The Wall Inc.trabajan el 1 de junio de 2019 en Sunland Park, Nuevo México. (Foto de Joe Raedle/Getty Images)

¿Quién pagará realmente por el muro fronterizo de Trump?

La versión oficial es que el Departamento de Defensa desviará fondos del presupuesto del Pentágono para construir el muro. ¿Cuáles son los proyectos que…

MÁS EN ESTA SECCIÓN

Sobrerreacción en las bolsas

¡La FED lo vuelve a hacer!

¡Deportaciones masivas!

El misterio de los drones

¿Dinero más barato?

¿Listos para la deportación?

La alarma de los drones

¿Cómo proteger sus derechos?

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

El proyecto presidencial de Donald Trump pareciera un fracaso, si tomamos en cuenta los resultados de sus propuestas.

Una reforma fiscal que golpeó el bolsillo de los votantes, una guerra económica con China que hizo desastres con la estabilidad financiera y unas políticas anti-inmigrantes que sólo pueden ser catalogadas de inhumanas, son tan sólo una breve muestra de ello.

Pero la promesa en la que centró su campaña presidencial parece ser lo único que Donald Trump podrá cumplir, cueste lo que cueste.

El pasado día martes, el secretario de defensa Mark T. Esper accedió a desviar 3.6 mil millones de dólares del presupuesto del Pentágono para construir el ansiado muro fronterizo del presidente, quitándole fondos a 127 proyectos militares a través de la declaración de emergencia puesta en marcha hace algunos meses.

Según explicó el Washington Post, Esper argumentó la medida asegurando que “el uso de los fondos de construcción militar era necesario para apoyar a las fuerzas estadounidenses desplegadas en la frontera sur”.

Gracias a los poderes presidenciales obtenidos a través de la declaración de emergencia nacional y de la omisión del Congreso, el Pentágono utilizará los fondos para poner en marcha 11 proyectos de construcción que abarcarán 175 millas de construcción y reparación del muro en la frontera.

Sin embargo, poco se sabía de cuáles eran los proyectos que quedarían sin fondos para cumplir el sueño presidencial.

Tan sólo dos días después, VICE publicó la lista de programas que financiarán el muro, y no podría ser más Trumpiana: escuelas para hijos de militares en bases en Japón y Alemania, becas para escuelas militares, un centro de desarrollo infantil en Maryland, fondos para mejorar vías de defensa en Texas, edificios de almacenamiento de equipos y hasta instalaciones de tratamiento para perros de trabajo en Guantánamo.

Sin embargo, los dos proyectos que se llevarán el golpe más fuerte son un símbolo de todo lo que esta Administración representa.

Un análisis del Washington Post explicó cómo alrededor de 400 millones de dólares para construir el muro provendrán de los proyectos de recuperación tras el devastador paso del huracán María en instalaciones militares en Puerto Rico.

Según reportó el diario El Nuevo Día, de esos 400 millones, alrededor de 341 habían sido originalmente asignados por el Congreso, según explicó al medio el general de brigada José Reyes de la Guardia Nacional, y eran destinados a “iniciativas que suelen ser desarrolladas por contratistas de Puerto Rico”.

Es decir, que los fondos dejarían sin trabajo también a compañías locales que contribuyen a la recuperación económica de la isla.

Otro de los proyectos que perderá fondos es la llamada Iniciativa de Defensa Europea, un programa militar que “apoya las actividades del ejército de Estados Unidos y sus aliados en Europa”, y que fue puesto en marcha después de la irregular anexión de Crimea por parte de Rusia.

Una de las funciones principales de este programa es la de “disuadir un posible ataque cibernético ruso” como el llevado a cabo durante las elecciones presidenciales del 2016 y que ayudó a la victoria de Donald Trump.

“Este es el baluarte de la Iniciativa de Defensa Europea creada después de que Vladimir Putin invadiera Ucrania”, explica James Hohmann en su análisis para el WaPo. “Junto con la insistencia de Trump para que Rusia vuelva al G-7, esta es la última muestra de un presidente que proyecta debilidad frente a la belicosidad del Kremlin”.

Y “belicosidad” es una manera muy noble de decirlo