A principios de año la Cámara de Comercio Hispana de Estados Unidos (USHCC) se vio envuelta en un coletazo del movimiento #MeToo cuando su director ejecutivo, Javier Palomarez, debiera entregar el cargo por acusaciones de corrupción y acoso sexual.

Según reportaba entonces el New York Times, Palomarez fue acusado por su ex directora de personal Giseel Gazek Nicholas por haber intentado besarle sin consentimiento. Aunado a ello, la junta de la Cámara inició una investigación por presunta malversación de fondos en su contra, tras la denuncia pública en contra de Palomares de la ex directora de la junta, Nina Vaca.

Después de que la Cámara determinara que “el pago de salarios fue apropiado” y que no proseguiría con el caso contra Palomarez, el ex director argumentó que las acusaciones fueron consecuencia de “una aventura amorosa deteriorada” entre su persona y Vaca, actual CEO del Pinnacle Group de Dallas.

“Hace aproximadamente dos años terminé la relación”, explicó Palomarez a la revista D CEO, de D Magazine. “Le dije ‘te quiero mucho y tengo todo el respeto del mundo por ti, pero no me voy a casa contigo ni dejaré a mi mujer. Nina no lo soportó. Una pelea llevó a otra y a otra”.

En el momento, la defensa legal de Vaca negó el recuento de Palomarez asegurando que se trataba de “un mal entendido” de su amistad, y que el ex CEO “intentaba desviar la atención y obtener retribución contra Nina por llamar la atención sobre las principales preocupaciones financieras”.

Sin embargo, la diatriba no quedó allí y Palomarez introdujo una demanda de acoso sexual contra Vaca el pasado viernes 13 de julio de la mano de su asistencia legal, Pinkerton Law Firm, en el condado de Harris en Houston (Texas).

Según el comunicado de información al que tuvo acceso AL DÍA, “el caso se trata de la rara ocurrencia de hostigamiento y represalias sexuales por parte de una mujer acusada de ser la acosadora, en ese caso, Nina Vaca”, descrita como “una poderosa e influyente persona que era la amante y la jefa del Sr. Palomarez”.

El equipo de comunicaciones de Palomarez aseguró que este martes se haría pública la demanda a través de una rueda de prensa en la que describirán las posturas “vengativas” de Vaca contra su cliente, después de haber iniciado “un plan para destruir(lo) profesional y públicamente como represalia por su decisión de poner fin a su aventura amorosa”.

La demanda introducida por Palomarez intentará limpiar su nombre de manera pública, acusando a Vaca de “acosadora sexual”, quien habría “coordinado el despido de su subordinado (Palomarez) de la Junta Directiva de la Fundación USHCC” basándose en denuncias financieras y pasando por alto la naturaleza íntima de la relación entre ambos.

El documento posee detalles de la relación así como testimonios de personas cercanas a la relación.

Por su parte, la defensa legal de Nina Vaca ha asegurado que "responderemos a esta denuncia a través del sistema legal", argumentando que "esta demanda ha caracterizado erróneamente y manipulado los hechos relacionados con la remoción del Sr. Palomarez de su rol de liderazgo en la Cámara, y la naturaleza de su relación con la Sra. Vaca. El Sr. Palomarez claramente busca venganza y retribución, con poco respeto por la verdad. Cabe destacar que fueron las acciones impropias y poco éticas del Sr. Palomarez las que llevaron directamente a su despido por parte de la Junta Directiva de la Cámara", según declaró su abogada Charla Aldous.