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Foto: Photo: Sarah Silbiger/New York Times
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Jefes de inteligencia nacional desmienten al presidente Trump

Durante una audiencia ante el Comité de Inteligencia del Senado, los funcionarios más altos de las agencias de inteligencia en el país pintaron una realidad…

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Si la veracidad detrás de las palabras del presidente ya era cuestionable, las declaraciones de los jefes de inteligencia nacional ante el Senado les hacen quedar como mentiras simples y llanas.

Desde su inauguración, Donald Trump ha hecho comentarios severos sobre la realidad en regiones que suponen un peligro para el país como Iran, Siria, Corea del Norte y, obviamente, Rusia.

No es de sorprender que el presidente estadounidense no sea precisamente un letrado en asuntos de política internacional, pero la distancia entre sus aseveraciones y las declaraciones de quienes más saben del asunto en el país es, cuando menos, alarmante.

Mientras Trump se ha empeñado en restar importancia a la injerencia rusa en los comicios presidenciales del 2016, dudando incluso de que realmente hubiese sido así, Christopher Wray (director del FBI), Daniel Coats (Director de Inteligencia Nacional) y Gina Haspel (directora de la CIA), han llegado a una conclusión diferente:

“Los esfuerzos de las redes sociales rusas continuarán enfocándose en agravar las tensiones sociales y raciales, minando la confianza en las autoridades y criticando a los políticos percibidos como anti-Rusia”, dice el documento introducido por los especialistas ante el Comité. “Moscú puede emplear kits de herramientas de influencia adicionales, tales como los dirigidos a diseminar información, realizar operaciones de pirateo y filtraje o manipulación de datos, de una manera más específica para influir en la política, las acciones y las elecciones en los Estados Unidos”.

Asimismo, y aunque Trump sí marcó un hito al ser el primer mandatario en funciones en reunirse con el líder de Corea del Norte, Kim Jong-Un, la desnuclearización del país no es tan segura como aseguró tras su encuentro.

Coats aseguró que las investigaciones de las agencias han observado “una actividad que es inconsistente con la total desnuclearización” de la península.

“Actualmente evaluamos que Corea del Norte buscará conservar sus capacidades de ADM y es poco probable que renuncie por completo a sus armas nucleares y a sus capacidades de producción, ya que sus líderes, en última instancia, consideran que las armas nucleares son fundamentales para la supervivencia del régimen”, agregó.

De igual manera, el presidente estadounidense ha logrado retirarse del acuerdo nuclear con Irán, argumentando que el país no estaba “cumpliendo lo prometido” y rehusándose a seguir “financiando” acuerdos que “no funcionaban”.

En esto, la directora de la CIA, Gina Haspel, tuvo también algo que agregar:

“En este momento, (Irán) técnicamente cumple (con el tratado), pero los vemos debatiéndose entre ellos, ya que no se dan cuenta de los beneficios económicos que esperan obtener”, aseguró.

Y, finalmente, la guinda de la torta fue la garantía de Coats de que ISIS no ha sido vencido.

Hace tan sólo semanas, Trump aseguraba ante las cámaras que “hemos vencido a ISIS” y que retiraría las tropas de Siria, no sólo cumpliendo con otra de sus promesas de campaña, sino dejando el camino libre para potencias como Rusia en el conflicto.

Desmintiendo radicalmente las aseveraciones presidenciales, Coats aseguró que, si bien ISIS estaba severamente debilitado en Iraq, el grupo “ha vuelto a sus raíces de guerra de guerrillas” y “aún dirige a miles de combatientes en Iraq y en Siria”.

Los especialistas hicieron énfasis en asuntos que han sido pasados por alto en la retórica presidencial – como el reforzamiento de la alianza entre China y Rusia – pero no dedicaron ni una coma a la única amenaza que el presidente ve desde su ventana: la frontera con México.