Como quien invita una vaca a una barbacoa, el Presidente Trump invitó al Caucus Hispano del Congreso a una recepción para celebrar el Mes de la Herencia Hispana.

Pareciera que la Casa Blanca no entendiera en profundidad la gravedad de su retórica de odio y sus políticas anti-inmigrantes, ni mucho menos la importancia de celebrar la influencia de la comunidad hispana en la sociedad estadounidense.

Es por ello que la representante demócrata por el primer distrito de Nuevo México, y presidente el Caucus, Michelle Lujan Grisham, envió un comunicado a la Administración explicando “por qué asistir al evento sería hipócrita”, según reportó Teen Vogue.

Lujan Grisham explicó con peras y manzanas al presidente el antagonismo entre la Casa Blanca y la comunidad Hispana, asegurando que presidentes como Lyndon B. Johnson y Ronald Reagan consagraron el Mes de la Herencia Hispana a “las importantes contribuciones que los inmigrantes de ascendencia española, mexicana, caribeña, centro y sur americana han hecho a Estados Unidos”.

La congresista señaló que el sueño americano “no brilla con mayor luz que en el corazón de los más de 800.000 jóvenes que llegaron a Estados Unidos cuando niños”, haciendo referencia a los llamados Dreamers, quienes desde la inauguración del Presidente Trump se mantienen en vilo esperando una solución a la suspensión de su programa de protección.

“Su Administración ha elegido eliminar abruptamente el programa que aseguraba que estos jóvenes pudieran seguir viviendo, trabajando arduamente y contribuyendo al país que aman”, continúa Lujan Grisham.

“Cada proclamación del Mes de la Herencia Hispana incluye específicamente el 15 de septiembre para poder celebrar la independencia de Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua. Trágicamente, muchos de estos países latinoamericanos han experimentado niveles de violencia, abusos a los derechos humanos, corrupción y crímenes sin precedentes, que han resultado en el asesinato, persecución y detención de muchas mujeres, individuos LGBTQ, periodistas, niños y jóvenes”, prosigue el comunicado.

Asimismo, Luján Grisham recuerda al presidente la eliminación del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), la separación de familias en la frontera, la retórica de deshumanización del inmigrante de la Administración y su negligencia a la hora de abordar el desastre tras el paso del huracán María por Puerto Rico.

La congresista concluye diciendo que “no somos una nación de miedo, crueldad, división o prejuicio. Somos una nación de dignidad, humanidad, tolerancia y esperanza, y esos valores esenciales y compartidos trascienden nuestras diferencias políticas”.

“Esos son los valores que sientan las bases del Mes de la Herencia Hispana (…) y esos son los valores que yo honraré este mes mientras celebro las contribuciones, la cultura, las profundas raíces y el legado de la comunidad Hispana en Estados Unidos. Como Hispano-Americana y Presidenta del Caucus Hispano del Congreso, espero que usted pueda entender el porqué no puedo hacer eso en su evento”.