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Iñaki Urdangarin, husband of Spanish princess Cristina, sister of Spain's King Felipe VI, leaves the court in Palma de Mallorca, the Balearic Islands, Spain, Feb. 23, 2017. EFE-EPA FILE/ATIENZA
Iñaki Urdangarin, marido de la Infanta Cristina, hermana del Rey Felipe VI de España, abandona el juzgado de Palma de Mallorca, en las islas Baleares, el pasado 23 de Febrero de 2017. EFE-EPA FILE/ATIENZA

Justicia española: ¿un miembro de la Realeza, a prisión?

El Tribunal Supremo ha condenado al marido de la infanta Cristina y cuñado del Rey a una pena de cinco años y 10 meses de cárcel por un caso de corrupción,…

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Para los lectores que aún no me conozcan, esta redactora de AL DIA  es de Barcelona y entre los años 1997 y 2002 cursó los estudios de Administración y Dirección de Empresas en ESADE, una de las escuelas de negocios más prestigiosas de España. Durante esos años coincidía por los pasillos con un rostro que a algunos les resultará peculiar: Iñaki Urdangarin, entonces un ex jugador de balonmano del Fútbol Club Barcelona y casado con la Infanta Cristina, hermana del actual rey Felipe VI de España.

Urdangarin iba un curso por delante del mío, pero entre los compañeros de la facultad corría el rumor de que pocas veces se le veía por clase. Algunos se lo cruzaban por el pasillo o a la salida de la cafetería, otros le vieron tomando clases particulares con el profesor de Finanzas, el profesor Massons. El caso es que terminó la carrera en tres años, cuando lo normal son cinco. “Igual el Balonmano le convalidó algunas asignaturas”, bromeaba una ex compañera de ESADE recientemente, al recordar a Urdangarin.

El marido de la infanta Cristina es noticia recurrente en los telenoticias y diarios de España desde hace siete años, cuando estalló un caso de corrupción en el que él y un exprofesor  suyo en ESADE, Diego Torres, experto en temas de mecenazgo y filantropía, con quien había formado una consultoría de negocios, fueron acusados de tráfico de influencias y contratos fraudulentos para la organización de eventos deportivos con el gobierno de las Islas Baleares (Mallorca), entre otros. El llamado "caso Nóos” levantó mucha polémica, porque desde entonces parece que Urdangarin se habría librado de sentencias duras como la cárcel, e incluso se le “había permitido” trasladar el domicilio familiar a Ginebra, en Suiza, donde su esposa, la infanta Cristina, obtuvo un trabajo en la Fundación La Caixa y la Fundación Aga Khan. El hecho de que Urdangarin se fuera de España y se librase de sentencias más dura fue motivo de indignación popular, y mucha gente se atrevía a acusar a la Justicia de no ser igual para todos los españoles.

Finalmente, la Justicia española parece haber dado el golpe de martillo definitivo y esta semana el Tribunal Supremo anunció una sentencia de cárcel contra Undargarin y sus socios en la trama del Caso Nóos. El esposo de la infanta Cristina y cuñado del Rey ha sido condenado a cinco años y diez meses de prisión por los delitos de malversación, prevaricación, fraude a la administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias; su exsocio, Diego Torres, deberá cumplir cinco años y ocho meses de condena carcelaria, y el expresidente de las Baleares, Jaume Matas, fue condenado a tres años y ocho meses.

Urdangarin ya se lo olía. Tras la primera sentencia de la audiencia de Palma de Mallorca, que se hizo pública el mes de febrero del 2017, el cuñado del Rey supo que su entrada en prisión era cuestión de tiempo, observaba ayer el diario La Vanguardia.

Este miércoles Urdangarin sabrá cuánto le queda para entrar en la cárcel. Lo que está claro es que su domicilio familiar seguirá siendo Ginebra, donde se quedarán la infanta y sus tres hijos - Pablo, Miguel e Irene Urdangarin- hasta que entren en la edad universitaria.

“¿Y ahora qué?”, se planteaba el martes el diario El País. A pesar de que tendrá que recoger el mandamiento de prisión, el marido de la infanta Cristina tiene derecho a pedir el indulto. Sin embargo, la última palabra para decidir si el condenado espera en libertad la concesión o no del indulto es de la Audiencia Provincial, que previamente tiene que reclamar informes a la Fiscalía Anticorrupción y a la acusación particular.

Urdangarin también puede pedir amparo al Tribunal Constitucional y solicitar la suspensión de la ejecución de la pena. Como criterio general, el Constitucional ordena el encarcelamiento mientras decide sobre los recursos de amparo presentados por el condenado en caso de que la la condena supere los cinco años de prisión, condición que cumple la condena de Urdangarin, según reportó  El País.

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