La semana pasada, el Presidente Trump anunció finalmente el despido de su Secretario de Estado, Rex Tillerson, a través de su cuenta personal en Twitter, poniendo fin a meses de rumores sobre la ruptura irremediable de su relación.

“Estamos cada vez más cerca de tener el gabinete que quiero”, dijo el magnate a los medios para argumentar su decisión de sustituir a Tillerson por el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Mike Pompeo.

Es cierto que el entonces el candidato Trump prometió llegar a Washington y “drenar el pantano”, pero su presidencia se ha transformado en uno de los períodos con más cambios de personal en las últimas décadas de gobierno estadounidense, alcanzando el hito del 40% en comparación con sus predecesores, según un estudio llevado a cabo por The Brookings Institution.

“Durante el primer año de gobierno, no es inusual que los presidentes despidan a miembros de su equipo por su bajo desempeño o por compromisos éticos”, reporta el estudio del conocido think tank de Washington D.C.  “Si bien algunos cambios son anticipados y posiblemente beneficiosos, el exceso de cambios en el gabinete conlleva problemas.”

Y es que, a pesar de sus argumentaciones, el Presidente ha manejado su equipo en medio de un profundo caos causado por  pobres elecciones.

El gabinete presidencial de Trump ha sufrido tres cambios importantes desde sus inicios: la transformación del Secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, en jefe de personal y su reemplazo con Kirstjen Nielsen; la renuncia de Tom Price como responsable de Salud por sus “extravagantes hábitos de gastos en viajes”, y su sustitución por Alex Azar, y finalmente el reciente despido de Tillerson, que prevé el ascenso de Mike Pompeo y su sustitución con la polémica agente Gina Haspel.

Pero los movimientos más importantes son los que han afectado al personal superior de la Casa Blanca.

Entre despidos y renuncias (voluntarias o forzosas), las personas más cercanas al día a día del presidente viven en una constante tensión, llegando al punto que el mismo Trump ha admitido que “su Casa Blanca no es un lugar fácil para trabajar porque él promueve el ambiente de conflicto”, según reportó National Public Radio, NPR.

“Es rudo”, dijo Trump. “Me gusta el conflicto. Me gusta tener a dos personas con diferentes puntos de vista. Ciertamente, tengo eso. Y entonces tomo una decisión. Pero me gusta verlo. Me gusta percibirlo”.

Lo que el Presidente cataloga de “conflicto”, el mundo entero lo percibe como “caos”. Sin embargo, para él, eso son sólo “noticias falsas”.

“Las personas siempre van y vienen, quiero un fuerte diálogo antes de tomar una decisión. Todavía tengo personas que quiero cambiar (siempre buscando la perfección). ¡No hay caos, sólo una gran energía!”, comentó Trump en Twitter a principios de mes.

Pero los hechos hablan por sí solos.

Estos son los funcionarios que han abandonado el barco presidencial durante los últimos 14 meses:

Patrick Kenneddy

o   Administración, bajo el mando del Secretario de Estado

o   Renunció el 1 de Enero del 2017

o   Le siguieron otros funcionarios de la misma oficina – Joyce Anne Barr, Gentry O. Smith y Michele Bond – dejando ese día casi todo el Departamento de Estado vacío, según explicó el portal Benzinga.

Sally Yates

o   Vice Fiscal General

o   Despedida el 30 de Enero del 2017 por no haber defendido el veto migratorio del presidente Trump contra ciudadanos de siete países musulmanes.

Michael Flynn

o   Asesor de Seguridad Nacional

o   Despedido el 14 de Febrero del 2017 por haber mentido al vicepresidente sobre la naturaleza de sus conversaciones con funcionarios rusos.

Craig Deare

o   Director Principal del Consejo de Seguridad Nacional para Asuntos del Hemisferio Occidental

o   Despedido el 17 de Febrero del 2017 por haber criticado fuertemente al presidente y a Steven Bannon.

Preet Bharara

o   Fiscal Federal para el Distrito Sur de Nueva York

o   Fue obligado, junto a los restantes 46 Fiscales nombrados durante la administración Obama, por el Fiscal General Jeff Sessions a abandonar el puesto el 11 de Marzo del 2017, a lo que se rehusó, siendo oficialmente despedido el día siguiente.

Angella Reid

o   Acomodadora principal de la Casa Blanca

o   Despedida el 5 de Mayo del 2017

James Comey

o   Director del FBI

o   Despedido el 9 de Mayo del 2017 por llevar adelante la investigación de los nexos entre la campaña Trump y Moscú.

Michael Dubke

o   Director de Comunicaciones de la Casa Blanca

o   Renunció el 18 de Mayo del 2017 por voluntad propia.

Sean Spicer

o   Secretario de Prensa de la Casa Blanca

o   Renunció el 21 de Julio del 2017 por discrepancias con el Presidente por la contratación de Anthony Scaramucci como Director de Comunicaciones.

Michael Short

o   Secretario de Prensa Asistente

o   Renunció el 25 de Julio del 2017 por acusaciones en su contra sobre filtraciones de información en la Casa Blanca.

Reince Priebus

o   Jefe de Personal de la Casa Blanca

o   Despedido el 28 de Julio del 2017 por el Presidente, quien necesitaba “mano dura” frente a las filtraciones de información.

Anthony Scaramucci

o   Director de Comunicaciones de la Casa Blanca

o   Despedido el 31 de Julio del 2017, a tan sólo 10 días de su nombramiento por comentarios en una entrevista con el New Yorker.

Steve Bannon

o   Jefe Estratega de la Casa Blanca

o   Despedido el 18 de Agosto del 2017, aunque el New York Times reportó que habría entregado su renuncia días antes de los eventos racistas en Charlottesville (Virginia).

Carl Icahn

o   Asesor Especial

o   Renunció el 18 de Agosto del 2017, a pesar de nunca haber tenido una posición oficial en la Casa Blanca.

Sebastián Gorka

o   Asesor de Contraterrorismo en la Casa Blanca

o   Renunció el 25 de Agosto del 2017, sin tampoco haber tenido una posición oficial en la Casa Blanca.

Tom Price

o   Secretario de Salud y Servicios Humanos

o   Renunció el 29 de Septiembre del 2017 después de que se hicieran públicos sus extravagantes gastos de viajes con dinero de impuestos nacionales.

John Feeley

o   Embajador de Estados Unidos en Panamá

o   Renunció el 27 de diciembre del 2017 argumentando “no poder servir al presidente”, después de que éste haya calificado a países africanos como “países de mierda”.

Omarosa Manigault Newman

o   Asistente del Presidente y Directora de Comunicaciones de la Oficina de Enlace Público.

o   Renunció el 10 de Enero del 2018, aunque CNN informó que habría sido John F. Kelly quien la habría despedido.

Brenda Fitzgerald

o   Directora de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades

o   Renunció el 31 de Enero del 2018 después de haber comprado acciones en una compañía de tabaco tan sólo un mes después de llegar al cargo, según reportó Político.

David Sorensen

o   Redactor de discursos

o   Renunció el 9 de Febrero del 2018 por acusaciones de violencia doméstica.

Rob Porter

o   Secretario de Personal

o   Renunció el 6 de Febrero del 2018 por acusaciones de violencia doméstica.

Hope Hicks

o   Directora de Comunicaciones de la Casa Blanca

o   Renunció el 28 de Febrero del 2018 después de testificar ante el Comité de Inteligencia de la Cámara durante nueve horas, como parte de la investigación de una posible colusión con Rusia.  

Gary Cohn

o   Principal Asesor Económico

o   Renunció el 7 de marzo del 2018 después de desencuentros con las nuevas tarifas en acero y hierro impuestas por el Presidente Trump.

Roberta Jacobson

o   Embajadora de Estados Unidos en México

o   Anunció su renuncia el 1ero de Marzo del 2018, argumentando “la búsqueda de mejores oportunidades”.

Andrew McCabe

o Sub Director General del FBI

o Despedido por el Fiscal General Jeff Sessions el viernes 16 de marzo del 2018 por presunto “mal comportamiento” a la hora de difundir información sobre la investigación en torno a Hillary Clinton en el 2016.