El lunes 2 de mayo, Politico filtró un borrador de la opinión de la mayoría del Tribunal Supremo de EE.UU., que indicaba que lo más probable es que el más alto tribunal del país vote para anular el caso Roe contra Wade, la histórica sentencia de 1973 que garantizó el derecho al aborto en el país durante casi cinco décadas.

En este momento, el aborto sigue siendo legal en Pensilvania, ya que el tribunal no ha emitido oficialmente un dictamen. Y, a diferencia de otros 13 estados, Pensilvania no tiene actualmente una "ley de activación", que restringiría inmediatamente el procedimiento una vez que desaparezcan las protecciones federales. 

Varios funcionarios electos estatales y locales han hecho declaraciones sobre la posible decisión, y los líderes demócratas han subrayado la importancia de luchar por la autonomía corporal en todos los niveles de gobierno. 

Tanto la concejala Helen Gym como el senador Nikil Saval asistieron a las protestas del martes 3 de mayo por la noche. Gym viajó a D.C. para concentrarse ante el Tribunal Supremo, animando a sus electores a unirse a ella o a asistir a la manifestación en Filadelfia. 

Saval asistió a la manifestación frente al tribunal federal de Filadelfia, uniéndose a cientos de personas que exigen que el alto tribunal defienda el derecho de las personas a la libertad reproductiva y que exija que el Congreso codifique inmediatamente Roe. 

"El gobierno no puede prohibir los abortos, sólo prohibirá el acceso a abortos seguros y legales", tuiteó Saval el martes. 

El jueves 5 de mayo, Gym fue más allá al presentar una resolución en la que pide que se celebren audiencias para evaluar las repercusiones en la ciudad si se deroga Roe v. Wade. Gym también pide que se exploren las medidas proactivas para salvaguardar los derechos civiles y avanzar en la justicia reproductiva. 

"Las personas con privilegios siempre tendrán acceso a ellos. Negará los abortos seguros y limitará la atención sanitaria reproductiva para los inmigrantes, la gente de color, los jóvenes, las víctimas de delitos y las personas trans", tuiteó Gym. 

La concejala Kendra Brooks, que ha abortado ella misma, dijo en un comunicado que su corazón ha estado "en llamas" desde que leyó el documento filtrado de la Corte Suprema, y dijo que el acceso al aborto es una política de afirmación de la vida que necesita una protección agresiva. 

"Estoy decidida a luchar junto a los líderes del movimiento por la justicia reproductiva por el futuro que nuestros hijos, nietos y comunidades merecen, en el que las personas tengan autonomía sobre sus cuerpos, capacidad de decisión sobre su atención sanitaria y acceso a los bienes públicos totalmente financiados que necesitan para vivir una vida sana, empoderada y realizada", escribió Brooks. 

El miércoles 4 de mayo, la congresista Mary Gay Scanlon se unió a los activistas del Planned Parenthood Action Fund y a sus compañeros demócratas de Pensilvania, incluido el gobernador Tom Wolf, reunidos en la ciudad en una muestra de apoyo al derecho al aborto. 

"Nos negamos a sentarnos y ver cómo se despoja a los habitantes de Pensilvania del derecho fundamental de control sobre sus propios cuerpos", dijo Scanlon, y añadió que es hora de aprobar finalmente la Ley de Protección de la Salud de la Mujer (WHPA). 

Aunque el senador Bob Casey se identifica como demócrata pro-vida, expresó su gran preocupación por lo que significa que el alto tribunal anule un precedente legal que ha estado en vigor durante 50 años. También declaró que el Congreso debería tomar más medidas para apoyar a las mujeres y las familias para reducir el número de abortos. 

El vicegobernador John Fetterman, candidato al Senado de EE.UU., calificó de "sagrado" el derecho al aborto y también pidió la eliminación del filibusterismo para que el Senado pueda aprobar la WHPA. 

El gobernador Tom Wolf expresó su continuo apoyo a los derechos reproductivos y prometió vetar cualquier legislación antiabortista que llegue a su mesa. 

Pero el mandato de Wolf finaliza pronto, y el fiscal general Josh Shaprio es el único demócrata que se presenta como candidato a gobernador. 

Si Shapiro gana, también prometió ser un defensor de la autonomía corporal y vetar cualquier proyecto de ley antiaborto aprobado por la legislatura estatal.