El 5 de septiembre de 2022, Día del Trabajo, el gobernador de California, Gavin Newsom, anunció la firma de la Ley de Responsabilidad y Recuperación de Normas de la Comida Rápida (AB 257), una victoria para el medio millón de trabajadores de la comida rápida de California. De esos aproximadamente 500.000 trabajadores, el 60% son latinos, el 80% son personas de color y dos tercios son mujeres.

El proyecto de ley autoriza la creación del Consejo de la Comida Rápida, un organismo compuesto por representantes de los trabajadores y de la patronal para establecer unas normas mínimas para los trabajadores que incluyan los salarios, las condiciones de salud y seguridad, el derecho a ausentarse del trabajo, la seguridad en el lugar de trabajo y la protección contra la discriminación y el acoso.

"California se ha comprometido a garantizar que los hombres y mujeres que han contribuido a construir nuestra economía de primer orden puedan participar en la prosperidad del Estado", declaró el gobernador Newsom en un comunicado de prensa.

"La acción de hoy da a los trabajadores de la comida rápida una voz más fuerte y un asiento en la mesa para establecer salarios justos y normas de salud y seguridad críticas en toda la industria. Estoy orgulloso de firmar esta legislación en el Día del Trabajo, cuando rendimos homenaje a los trabajadores que mantienen nuestro estado en funcionamiento mientras construimos una economía más fuerte e inclusiva para todos los californianos", continuó.

La firma se produce después de una lucha de años para que se escuchen las voces de los trabajadores, una lucha en la que muchos trabajadores de comida rápida han dicho que han sido explotados y que se les han proporcionado condiciones de trabajo inseguras. 

Según el Sindicato Internacional de Empleados de Servicios, esto ha dado lugar a más de 400 huelgas y a la presentación de casi 300 quejas sobre salud, seguridad y salarios en toda California ante organismos estatales y locales.

Una de estas quejas notables se produjo durante la pandemia de COVID-19, en la que el gerente de un restaurante de comida rápida Jack-in-the-Box le dijo a un trabajador que dio positivo en la prueba de COVID: "Ponte una máscara y no se lo digas a nadie".

La empleada de Jack-in-the-Box, Ingrid Vilorio, dijo en un comunicado de prensa que la lucha del trabajador de la comida rápida "fue una batalla de Goliat contra David y sólo tuvimos nuestra voz para asegurar que la AB 257 se hiciera realidad".

Parte de los esfuerzos para que el gobernador Newsom y los legisladores oficiaran el proyecto de ley fue una táctica conocida como "negociación sectorial", en la que los trabajadores de una misma industria se unen para promover el cambio, en lugar de hacerlo empresa por empresa.

Otros sectores, como el de los salones de manicura, que denuncian una explotación y un abuso desenfrenados hacia sus trabajadoras de servicios, podrían utilizar tácticas similares en su lucha por la mejora de los salarios en el sector, táctica que prevalece tanto en Estados Unidos como en otros países.