La Justicia chilena procesó a
un ex recluta en calidad de autor del asesinato del cantautor VíctorJara, quien tras ser torturado recibió 44 disparos en todo el cuerpo
días después del golpe de Estado de Augusto Pinochet, informaron hoy
fuentes judiciales.

El juez Juan Fuentes Belmar procesó al ex recluta José Adolfo
Paredes Márquez, de 54 años, por homicidio calificado.

El imputado quedó en prisión preventiva en una cárcel de máxima
seguridad de Santiago y se le asignó un abogado de turno, ya que no
cuenta con uno propio.

En tanto, el otro ex militar detenido en relación al caso,
Francisco Quiroz Quiroz, fue dejado en libertad por el tribunal.

Ambos fueron detenidos el pasado viernes acusados de participar
en el asesinato de Jara, ocurrido el 15 de septiembre de 1973 en
dependencias del Estadio Chile, que fue centro de detención durante
la dictadura que ejerció el fallecido Augusto Pinochet hasta 1990.

Paredes y Quiroz eran reclutas en la época del crimen y estaban a
cargo de custodiar a los presos políticos del centro de detención,
último lugar donde se vio con vida al director de teatro y autor de
temas como "El derecho de vivir en paz" y "Te recuerdo Amanda".

Según numerosos testimonios, a Jara lo torturaron durante horas,
le arrancaron la lengua, le golpearon las manos con culatas de
fusiles hasta triturárselas y finalmente lo acribillaron a tiros.

Su cuerpo fue encontrado tres días después cerca de un
cementerio.

En mayo del año pasado, el juez Fuentes Belmar cerró el sumario
del caso con un único inculpado, el jubilado coronel del Ejército
Mario Manríquez Bravo, quien fue director del campo de prisioneros
en el que fue transformado el Estadio Chile.

La investigación se reabrió a principios de junio, cuando el
magistrado acogió gran parte de las 40 diligencias solicitadas días
antes por el abogado querellante y representante de la familia,
Nelson Caucoto.

Caucoto manifestó este martes su disconformidad con el dictamen
del juez, ya que adujo que el interés de la familia del cantautor es
dar con el paradero de los autores intelectuales del crimen.

"No es nuestro interés perseguir a los conscriptos (reclutas),
son una parte dentro de todo el eslabón, son la parte más débil, más
vulnerable. Me interesan los jefes (...), quiénes dieron las órdenes
de ejecución de Víctor Jara", subrayó.