El fiscal de Nueva York, Andrew Cuomo,
anunció su intención de demandar a la empresa inmobiliaria
Vantage Properties, una de las mayores en la ciudad, para que cese
de hostigar a inquilinos de apartamentos de renta regulada, muchos
de ellos hispanos.

Vantage ha adquirido 125 edificios con más de 9.500 apartamentos
desde marzo de 2006, que en su mayoría son de renta controlada y
están repartidos por los barrios de Queens, Harlem y el Alto
Manhattan.

El fiscal estatal alega que esa empresa está tomando medidas para
forzar a los inquilinos que llevan más tiempo en ese tipo de
apartamentos a abandonarlos, a la vez que aplica incrementos
elevados a las rentas para los nuevos residentes.

La fiscalía explicó en un comunicado de prensa que esa compañía
"presiona de forma agresiva" a los vecinos con más tiempo de
residencia en los apartamentos de renta controlada "mediante el
envío de notificaciones legales sin base alguna e iniciando
procedimientos de desahucio en la Corte de Vivienda".

Explicó que, después de adquirir un edificio, Vantage trata de
desalojar a algunos de los inquilinos alegando que no viven allí o
que esa no es su residencia principal, o que no pagaron la renta a
tiempo.

Las acciones de esa empresa se basan muchas veces en información
que es incorrecta o que debe saber que es falsa, según la
fiscalía.