Escrito por: Alejandra Legarda- Periodista

Estudio revela que el 85% de los fumadores sufren un deterioro cognitivo significativo en un periodo de hasta 10 años

Un nuevo estudio realizado por investigadores en salud ha puesto de manifiesto los alarmantes efectos del tabaquismo en la función cognitiva. Según los datos, el 85% de las personas que fuman habitualmente pueden experimentar una disminución considerable en sus capacidades cognitivas a lo largo de una década. Este deterioro incluye la pérdida de memoria, la reducción de la capacidad de concentración y la ralentización en la toma de decisiones, lo que puede afectar significativamente su calidad.

Los expertos explican que las toxinas presentes en el tabaco no solo dañan los pulmones y el sistema cardiovascular, sino que también tienen un impacto directo en el cerebro. El tabaquismo crónico puede acelerar el envejecimiento del cerebro, comprometiendo áreas clave responsables de la cognición y aumentando el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

Además, el estudio subraya que aunque los efectos adversos son más pronunciados en los fumadores a largo plazo, incluso quienes fuman en menor cantidad o con menos frecuencia no están exentos de riesgo. Los investigadores enfatizan que, a pesar de los avances en la comprensión del daño causado por el tabaco, muchas personas aún desconocen el grado en que puede afectar.

En respuesta a estos hallazgos, los especialistas insisten en la importancia de dejar de fumar lo antes posible para mitigar los efectos negativos. Según algunos estudios adicionales, aquellos que logran abandonar el hábito pueden experimentar una recuperación parcial de su función cognitiva, especialmente si toman medidas para llevar un estilo de vida más s.

Esta investigación refuerza las advertencias médicas sobre los múltiples riesgos asociados con el tabaco, más allá de los problemas respiratorios y cardíacos.