La ola progresista en el país es un fenómeno definitivamente imparable.

Después de que el Congreso se transformara de manera radical tras las elecciones de mitad de período del 2018 –donde entre jóvenes, inmigrantes y una gran cantidad de mujeres el país empezó a verse verdaderamente representado– las primarias al Congreso de este año parecen indicar que el país está convencido de que este es el camino.

Y el mejor ejemplo de ello es la trayectoria de Alexandria Ocasio-Cortéz.

Tras haber vencido al titular Joe Crowley y hacerse con el puesto de representante del distrito 14 de Nueva York, AOC se ha ganado la confianza de muchos y el desprecio de algunos.

Entre ellos, el mercado financiero y su séquito, quienes han invertido miles de dólares en intentar derrotarla este año, por miedo a que las propuestas progresistas de la congresista realmente consigan invertir el sistema económico que sólo favorece al 1%.

"Los CEOs de Wall Street, desde Goldman Sachs hasta Blackstone, se volcaron en millones para derrotar nuestra campaña de base esta noche", escribió AOC tras hacerse pública su victoria sobre Michelle Caruso-Cabrera, ex corresponsal internacional de la CNBC y antigua Republicana, "pero su dinero no podía comprar un movimiento".

AOC se llevó el 72,6% de los votos contados el martes por la noche, y recaudó 10,5 millones de dólares en donaciones individuales, mientras Caruso-Cabrera, quien contaba con el apoyo de los principales inversores de Wall Street, tan sólo recaudó 2 millones.

Según explicó el Washington Post, Caruso-Cabrera obtuvo 23.850 dólares de los empleados de los mayores bancos del país, incluyendo 5.600 dólares del director general de Goldman Sachs, David Solomon, según los registros de la Comisión Federal de Elecciones.

También recaudó otros 16.800 dólares de seis ejecutivos del gigante del capital privado Blackstone Group, incluido el director general Steve Schwarzman.

Y “un desfile de los principales inversores de Wall Street” también donó el máximo permitido a Caruso-Cabrera, según continúa el Post.

Entre ellos se encuentran multimillonarios de fondos de cobertura: Christopher Flowers; Paul Tudor Jones de Tudor Investment; John Paulson & Co. de Paulson; y Nelson Peltz y Peter May de Trian Fund Management. La lista continúa, ya que también recogió cheques del fundador y multimillonario de Interactive Brokers, Thomas Peterffy; del director general de Crestview Partners, Barry Volpert; y del fundador de Key Square Group, Scott Bessent.

Varios de sus patrocinadores eran tradicionalmente donantes del Partido Republicano: El fundador de TD Ameritrade Joe Ricketts, el ejecutivo de Elliott Management y ex funcionario de la administración Bush Dan Senor; el ex economista de la administración Bush Larry Lindsey; el fundador de Home Depot y el multimillonario inversor Ken Langone; el multimillonario director ejecutivo de Gristedes Foods John Catsimatidis; y el multimillonario inversor Stanley Druckenmiller. (Druckenmiller también contribuyó con 25.000 dólares a un súper PAC llamado Fight for Our Communities, que gastó 28.000 dólares en anuncios digitales y correo directo dirigidos a Ocasio-Cortez; el esposo de Caruso-Cabrera, Stephen Dizard, socio gerente de la firma de inversiones Wood Capital Partners, fue el principal donante del grupo, contribuyendo con 30.000 dólares, según los registros de la FEC).

Sin embargo, nada de eso fue suficiente.

En una declaración en video a sus partidarios, AOC dijo: "No hay precio para tener gente que se anima por el valor de sus convicciones y por el deseo de un mundo mejor".