Unos 130 inmigrantes fueron arrestados tras una desobediencia civil colectiva para exigir el fin de las deportaciones. Nueve inmigrantes y miembros del clero de Movimiento Nuevo Santuario (NSM) de Filadelfia se encontraron entre los detenidos y  fueron llevados al Centro de Detención de Anacostia en Washington D.C.

Según Nicole Kligerman, organizadora de NSM, alrededor de 112 personas fueron detenidas durante la protesta llevada a cabo por organizaciones de fe. Cada uno de los detenidos fue liberado este jueves por la noche.

"Sentí mucha humildad por la fuerza que demostraron los inmigrantes arrestados, que estuvieron dispuestos a luchar por los miembros de su comunidad", dijo Kligerman "Es muy poderoso y me insta a seguir trabajando por esta causa".

"Tras un año que rompió el récord de deportaciones, el fracaso del Congreso por aprobar una reforma migratoria integral y la crisis sin precedentes de refugiados en la frontera, exigimos que el presidente Obama ponga fin inmediato a todas las deportaciones”, declaró la organización en un comunicado. “También que amplíe el programa de acción diferida para todos los inmigrantes".

El grupo de manifestantes de Filadelfia incluyó a inmigrantes y a cuatro pastores de iglesias del área incluyendo St United Methodist Church, West Kensington Ministry, and Central Baptist Church of Wayne.

El director de NSM Peter Pedemonti, el pastor hondureño Adan Mairena, del Ministerio West Kensington, y el pastor Marcus Pomeroy, de Iglesia Bautista Central de Wayne, estuvieron entre los arrestados.

Otra detenida fue la reconocida líder comunitaria Carmen Guerrero de Norristown, una inmigrante de México que ha trabajado con la comunidad durante los últimos 15 años.

"Las injusticias no se debe permitir en ninguna parte del mundo. Como ciudadana del mundo, es mi obligación moral hacer oír mi voz y actuar", dijo Guerrero.

Blanca Pacheco, una inmigrante de Ecuador y miembro de NSM que también fue arrestada, dijo que sentía una gran responsabilidad de abogar por ella y su comunidad. "Como madre tengo la obligación de enseñar a mis hijos, que son la próxima generación, sobre el amor incondicional. Todos tenemos el derecho a trabajar, soñar, crecer y respirar libremente en cualquier parte del mundo sin ser ahogado por palabras de odio ", dijo Pacheco.

En abril del 2014, la ciudad de Filadelfia se convirtió en líder del movimiento nacional de derechos de inmigrantes con una orden ejecutiva que puso fin a la mayoría de las peticiones de detención de inmigrantes por parte de ICE.

"El gobierno local ha hecho su parte, pero la reforma migratoria no puede avanzar hasta que el presidente Obama tome acción", agregó NSM.