El Fiscal General aseguró este jueves que las ciudades que se rehúsen a dedicar sus esfuerzos a combatir principalmente los crímenes cometidos por inmigrantes indocumentados, no podrán participar en el nuevo programa de entrenamiento para la reducción de crímenes, que fue hecho público en el mes de junio por el Departamento de Justicia.

Según reportó Reuters, para que las ciudades participen del programa de formación del Departamento de Justicia, titulado Public Safety Partnership Program, deberán previamente responder algunas preguntas y asegurar que no poseen ninguna política “santuario” que proteja a los “inmigrantes ilegales” de una deportación y que permitirán a los funcionarios federales de inmigración acceder a sus cárceles locales.

En este momento, los departamentos de policía que se encuentran bajo dicho cuestionamiento son los de Albuquerque (Nuevo México), Baltimore (Maryland) y San Bernardino y Stockton (California).

Las declaraciones del día jueves de Jeff Sessions, corroboran la  presión que ejerce el gobierno contra cualquier medida que ampare o proteja a la comunidad inmigrante. A esto se suma la declaración del presidente de una nueva estrategia de inmigración para el país basada en los méritos profesionales y el manejo del idioma inglés.

“Al proteger a criminales de las fuerzas de inmigración, las ciudades y los estados con las políticas denominadas ‘santuario’ nos hacen a todos más vulnerables”, declaró el Fiscal General.

El nuevo programa National Public Safety Parnership ha sido promocionado desde hace algunos meses y cuenta con una iniciativa de tres años en los cuales se desarrollarán nuevas medidas en áreas con altas tasas de crímenes violentos.

Las ciudades pre-seleccionadas para el programa son Búffalo, Nueva York, Houston, Texas y el estado natal de Sessions, Birmingham, Alabama, según continúa el reporte.