La comunidad inmigrante ha obtenido una importante victoria después de que el pasado viernes la jueza Dolly M. Gee de la Corte para el Distrito Central de California decidiera que las agencias de inmigración deben liberar a los niños inmigrantes que hayan pasado más de 20 días en los centros de detención

Citando la gravedad de la pandemia del Coronavirus, Gee ordenó la liberación de los niños detenidos en tres centros en el país, dos en Texas y uno en Pensilvania, quienes han estado recluidos por más tiempo que el establecido por ley.

Según reportó el New York Times, para el 8 de junio, habían 124 niños viviendo en esos centros de detención y bajo condiciones que parecen hacer caso omiso a las recomendaciones de los Centros de Prevención de Enfermedades para controlar la propagación de la pandemia.

Tan sólo el mes pasado, once niños y padres dieron positivo por coronavirus en un centro de detención familiar en Karnes City, Texas, y alrededor del país hay cerca de 2.500 inmigrantes detenidos por ICE que han dado positivo por el virus.

“Los centros residenciales familiares están en llamas y no hay más tiempo para medias tintas,” escribió la jueza Gee, ordenando a ICE liberar los niños con “toda la rapidez deliberada”, ya sea a sus padres o a tutores adecuados.

El Servicio de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos "está revisando actualmente la orden más reciente emitida por la Corte de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Central de California ayer por la tarde" en la que el juez ordenó al gobierno federal que liberara a los niños migrantes para mediados de julio, según dijo un portavoz del ICE a CNN.

"La Administración debe dejar de usar esta crisis de salud pública como un medio para implementar políticas de inmigración ilegales e inhumanas. En estos tiempos extraordinarios, el sufrimiento humano no tiene por qué agravarse encerrando a las familias o infundiendo miedo en el corazón de los padres migrantes", se lee en la carta, dirigida al Secretario de Seguridad Interior en funciones, Chad Wolf, y al Director del Servicio de Inmigración y Aduanas en funciones, Matt Albence.

La decisión de la jueza Gee no es sólo una victoria para los inmigrantes detenidos y sus defensores, sino también para quienes han estado luchando contra le decisión del gobierno de poner fin al llamado acuerdo Flores, una sentencia federal que estipula el tiempo máximo de detención para un niño inmigrante a 20 días, y que estuvo en vigencia desde 1997 hasta el 2019, cuando la Administración Trump decidió rescindirlo bajo la promesa de tratar a todos los niños bajo custodia “con dignidad”.

Sin embargo, fue la misma jueza Gee quien negó a la administración la solicitud de extender las detenciones familiares en el 2018, y es nuevamente quien le ha puesto límites al maltrato y a la negligencia gubernamental, cuando de lidiar con inmigrantes se trata.