Falta menos de un mes para la Convención Nacional Democrática de Milwaukee, WI, y ya se ha anunciado uno de los oradores principales, aunque está afiliado al partido de la oposición.

El 20 de julio, el ex gobernador de Ohio John Kasich apoyó a Biden y anunció que hablaría en la convención. 

El republicano de centro ha sido durante mucho tiempo un crítico del actual presidente.

Kasich se postuló y se ubicó en cuarto lugar en las mismas primarias republicanas de 2016 que ganó Donald Trump.

Después de retirarse, Kasich no apoyó al nominado de su partido y cuando llegó el día de las elecciones, escribió al senador de Arizona John McCain en lugar de votar por Trump.

En 2017, hubo discusiones sobre la formación de un boleto de unidad en 2020 con el gobernador demócrata de Colorado, John Hickenlooper, mientras recorrían el país hablando de soluciones bipartidistas a cuestiones de política. 

Cuando se trató de la impugnación del presidente, el ex gobernador se separó de su partido de nuevo y lo apoyó. 

"Este comportamiento, en mi opinión, no puede ser tolerado y habrá que tomar medidas", dijo a la CNN en octubre, antes de la votación para la impugnación de Trump en la Cámara de Representantes.

Kasich es el último republicano en unirse a la campaña de Biden. 

"43 exalumnos para Biden" es un grupo iniciado por ex funcionarios de George W. Bush para movilizar a los republicanos desafectos para que voten por el candidato demócrata. 

Otras figuras republicanas, como el ex jefe de gabinete del vicepresidente Dan Quayle y un fuerte defensor de la invasión estadounidense a Irak, Bill Kristol, tuiteó a favor de que Kasich hablara en la convención. 

"Es genial que John Kasich hable en la (virtual) convención demócrata", escribió Kristol. 

Se anunció que la convención sería mayormente virtual el 24 de junio. El DNC dijo que aunque Biden aceptará la nominación en Wisconsin, los miles de delegados emitirán sus votos a distancia. 

¿Pero cómo ha podido Joe Biden cortejar a muchos miembros del GOP?

Cuando el senador de Vermont Bernie Sanders abandonó las primarias presidenciales demócratas el 8 de abril, esto hizo esencialmente que Biden fuera el nominado, pero también significó que iba a tener que apelar a los progresistas para mantener su entusiasmo hasta la noche de las elecciones. 

Él iba a tener que hacer esto mientras trataba de encontrar republicanos que se unieran a su movimiento.

Sanders apoyó a Biden menos de una semana después de suspender su campaña. Su compañera progresista y aspirante a la presidencia Elizabeth Warren siguió al día siguiente con su apoyo. 

El Senador Sanders se aseguró de movilizar su personal rápidamente para ayudar a Biden. Los dos hombres establecieron grupos de trabajo de unidad que fueron dirigidos por políticos de alto perfil que respaldaron sus aspiraciones. John Kerry y Alexandria Ocasio-Cortez dirigieron el grupo de trabajo sobre el cambio climático.

Los antiguos ayudantes de Sanders han trabajado en estrategias y anuncios para movilizar el voto latino por Biden, ya que el bloque de votos ha sido una debilidad para su campaña.

Al haber hecho todo esto antes, el ex vicepresidente ha unificado el partido al menos en el papel y está libre para centrarse en los votantes republicanos. 

Biden también ha limitado sus ataques al presidente, no a sus votantes. A diferencia de Hillary Clinton en 2016, cuando dijo que la mitad de los partidarios de Trump pueden ser colocados en la "canasta de los deplorables".

El ex vicepresidente ha seguido defendiendo el trabajo con los miembros del Congreso desde el otro lado del pasillo y no ha descartado la elección de un compañero de fórmula republicano, aunque es poco probable. 

Para la campaña de Biden era razonable tender la mano a Kasich, ya que ambos hombres realizaron un acto conjunto en la Universidad de Delaware en octubre de 2017, en el que hablaron de salvar las divisiones políticas y partidistas en la época de Trump.

El discurso de Kasich recordará el de Michael Bloomberg en la convención de 2016 en Filadelfia. 

Independiente político en ese momento, Bloomberg fue alcalde republicano de la ciudad de Nueva York. 

Ambos hombres eran vistos como extraños a los demócratas, pero se destacan para ampliar su coalición. 

Que Kasich apoye a Biden podría potencialmente poner al estado de Ohio en juego para los demócratas.

Era un gobernador popular que consistentemente mostraba bipartidismo y una encuesta de Morning Consult encontró que el 49% de los demócratas en Ohio aprobaban su desempeño en el trabajo.  

Una encuesta de Gallup de junio reveló que sólo el 2% de los demócratas en todo el país aprobaba el desempeño del Presidente Trump. 

Una encuesta de la Universidad de Quinnipiac publicada el 24 de junio mostró que Biden lideraba por poco a Trump por un punto, sin embargo Trump ganó a Ohio por ocho puntos en 2016.

El estado de Buckeye ha sido clasificado como un predictor fiable de las elecciones presidenciales ya que sus votantes se han puesto del lado del eventual ganador desde 1964.