5 puntos clave para entender las Elecciones de Mitad de Período
Entre el nuevo control de la Cámara por los Demócratas y la retención del Senado por parte de los Republicanos, hay muchos factores importantes de estas…
Esta es la calma después de la tormenta.
Después de meses de intensas campañas políticas y de humores alborotados, las elecciones de mitad de período han llegado a su final, y los resultados son claros: una gran parte del país quiere cambiar la manera en la que se hace política en Estados Unidos.
La mañana del miércoles se ha dividido entre un presidente que asegura haber ganado las elecciones y un partido demócrata que asegura haber conseguidos sus objetivos.
¿Qué pasó realmente?
Dejemos en claro algo: la Ola Azul no se trataba de retomar todo el Congreso. Estaba claro desde un principio que ganar una mayoría en el Senado era imposible para los Demócratas, considerando que los puestos abiertos a elección eran tan sólo 35 de los 100 que conforman la Cámara Alta, de los cuales los Republicanos debían defender sólo nueve.
Según explica Vox, el partido demócrata tenía desde el principio una “desventaja” importante en el mapa del Senado, donde 10 senadores Demócratas competían por la reelección “en estados donde Donald Trump ganó en el 2016”.
La meta fundamental del Partido Demócrata era retomar la Cámara de Representantes durante esta elección de mitad de período, y fue precisamente eso lo que lograron.
De los 435 asientos disponibles en la Cámara, los Demócratas consiguieron 219, consiguiendo, en palabras del Washington Post, “un asiento en la mesa en Washington”.
Hasta este momento, la mayoría Republicana había mantenido al margen la voz demócrata en las discusiones legislativas nacionales. Con una mayoría en la Cámara baja, los Demócratas tienen ahora la posibilidad de poner un alto a las decisiones desenfrenadas que tomaba la Administración Trump bajo el amparo de su partido.
CONTENIDO RELACIONADO
La verdadera conclusión de estas elecciones es que la gran fuerza de la demografía nacional se hizo presente en los puestos de votación.
Entre candidatos LGBTQ, musulmanas, nativo americanas y, fundamentalmente, mujeres, la bancada Demócrata es ahora la más diversa en la historia del país.
Victorias como las de Ayanna Pressley en Massachusetts, Sulvia García y Verónica Escobar en Texas, Ilhan Omar en Minnesota y Rashida Tlaib en Michigan, son tan sólo algunas de las evidencias de un profundo cambio en la política nacional.
Las elecciones del día martes marcaron un récord histórico en la cantidad de mujeres electas para representar a sus ciudadanos.
Según explicó Axios, estas elecciones han marcado un hito en la política estadounidense, después de que 40 mujeres de color fueron electas para la Cámara, Tennessee tiene su primera senadora, Dakota del Sur y Maine escogieron sus primeras gobernadoras, Michelle Lujan Grisham se transformó en la primera Latina Demócrata en ser elegida como gobernadora, y 33 de las carreras por el Congreso se debatieron entre dos mujeres.
Asimismo, es primera vez que “más mujeres se registraron para votar que hombres”, reduciendo de manera radical, y por primera vez, la diferencia de participación entre ambos géneros.
Finalmente, la radical polarización del Congreso traerá consigo dos años de profundas diferencias, donde los Demócratas insistirán en oponerse a las medidas anti-inmigrantes de la Administración Trump, y deberán enfrentarse a un Senado enfocado en solidificar su poder en la Corte Suprema, asegurando que las decisiones de la Casa Blanca tengan una carta blanca a nivel legislativo.
DEJE UN COMENTARIO:
¡Únete a la discusión! Deja un comentario.