La ayuda y asistencia a Puerto Rico – Estado Libre asociado a Estados Unidos desde 1952 – no puede “quedarse para siempre”, o eso ha advertido Donald Trump el día jueves a través de su cuenta en Twitter.

“No podemos mantener a la FEMA (Agencia Federal para el Manejo de Emergencias), a los militares y a los socorristas, que han sido extraordinarios bajo las circunstancias más difíciles, en Puerto Rico para siempre”, sentenció el presidente estadounidense a través de su cuenta en Twitter.

“La red eléctrica y toda la infraestructura ya eran un desastre antes del paso de los huracanes”, había dicho previamente Trump, desencadenando fuertes críticas por su aparente insensibilidad ante el desastre vivido por los puertorriqueños después del paso del Huracán María por la isla.

Ante la escandalosa declaración del presidente, el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, respondió que “los pobladores de la isla merecen el mismo trato que los habitantes del territorio estadounidense”, según reportó Animal Político.

Rosselló escribió en Twitter que los puertorriqueños merecen “los derechos que les corresponden a los ciudadanos de nuestra nación”.

Puerto Rico ha sido víctima del paso de dos de los huracanes más fuertes registrados en la historia del Caribe (Irma y María), cuyo saldo ha sido la muerte de más de 50 personas y daños que superan los 80.000 millones de dólares.

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La crisis económica que ha condenado a la Isla a la bancarrota supone que su reconstrucción será una empresa casi insostenible, por lo cual la falta de suministros y recursos básicos mantienen a la población en estado de emergencia.

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Es por ello que el gobernador Rosselló solicitó al Congreso estadounidense que “reestructure su deuda de más de 70.000 millones de dólares, de manera de tener un respiro y una vía económica para abordar la crisis e intentar solventar la caótica situación en la que se ve sumido Puerto Rico.

Como continúa el portal, horas después de que el presidente Trump se manifestara en su cuenta en Twitter, la Casa Blanca intentó controlar los daños al emitir un comunicado en el que se comprometía a ayudar a Puerto Rico en su proceso de recuperación.

“Estamos comprometidos a ayudar a Puerto Rico, nuestra administración está trabajando con el gobernador Rosselló y con el Congreso para identificar el mejor camino fiscal”, reza el documento.

Así pues, la Cámara de Representantes estadounidense procedió a aprobar un paquete de asistencia ante desastres, a pesar de los comentarios del Presidente.

El órgano, controlado por una mayoría Republicana, aprobó en un voto de 353-69 un socorro de emergencia de 36.5 mil millones de dólares, que se distribuirán entre Puerto Rico y otras áreas afectadas por desastres en los últimos meses, según reportó Reuters.

El vocero de la Cámara, Paul Ryan, tiene planificado dirigir una delegación bipartidista del Congreso que se dirigirá a Puerto Rico durante el día viernes.