Sobre las 10 de la mañana (hora local) empezó una jornada que unió a Colombia. Adultos y jóvenes caminaron por el centro de Bogotá, capital del país, a la falda de los cerros orientales con un sentimiento de euforia y felicidad. Llegaron hasta la Plaza de Bolívar, lugar donde se posicionó como presidente Gustavo Petro Urrego.

El evento contó con varias actividades culturales en vivo con cantantes, poetas y bailarines de todas las regiones del país. Se distribuyeron en puntos estratégicos y concurridos del centro, en seis tarimas, más la principal que se encontraba en la Plaza de Bolívar. 

Entre las comparsas más esperadas de la jornada se destacó la de “Negros y Blancos” antes de la posesión. Representó una de las fiestas populares de más tradición en el país y que se celebra en la primera semana de enero, en Pasto, ciudad del sur del país.

La minga indígena también estuvo presente este día, en el cual los colombianos se sentían en una fiesta de victoria. 

Más de 7 mil personas se concentraron en la plaza de Bolívar, a pocas horas de recibir al nuevo presidente.

Alrededor de las 2:00 p.m (horas local), la vicepresidenta Francia Márquez llegó al acto de posesión y en medio de la multitud se escuchaba ese grito de esperanza del “Sí se pudo”, con lágrimas en la cara de aquellas personas que también tenían la bandera tricolor en la espalda.

En el mismo orden fueron llegando los presidentes invitados. Uno de los recibidos con más entusiasmo fue el presidente Gabriel Boric, de Chile, a quien el público gritaba su nombre.

Pasada las 3:00 p.m (hora local) llegó Gustavo Petro junto a su esposa y sus hijos. El público esperó por horas ese momento que por fin pudo cumplirse.

Luego de su llegada y saludos, el himno nacional fue cantado por las voces de miles de colombianos. 

Después y tras dar una emotiva presentación, el presidente del Congreso, Roy Barreras, le tomó el juramento a Petro como el nuevo presidente de la República de Colombia. La banda fue colocada por María José Pizarro, senadora e hija de Carlos Pizarro, ex guerrillero del M19 y ex candidato presidencial asesinado en 1990.

Los asistentes a la cita histórica vivieron uno de los momentos más emotivos cuando el ahora presidente Gustavo Petro tomó el juramento a Francia Márquez como vicepresidenta. En las diferentes plazas se sintió júbilo por cumplir tal hazaña, que para muchos es el fin de una soledad que duró 100 años, como la obra cumbre de Gabriel García Márquez.

Para finalizar la jornada se dió entre abucheos y silbidos la salida del ahora expresidente Iván Duque, quien dió su último desfile en la Plaza de Armas acompañado de su familia. 

Se vivió con tranquilidad y en completa paz, los presentes sentían la felicidad y la esperanza de un futuro que promete un “cambio por la vida”, un cambio que los colombianos anhelan.