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Filadelfia, ejemplo para reducir consumo de sodio en restaurantes

Reducir los niveles de sodio en los alimentos que se consumen en restaurantes puede hacer una diferencia en las comunidades.

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Reducir los niveles de sodio en los alimentos que se consumen en restaurantes puede hacer una diferencia en las comunidades, de acuerdo con un informe de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) divulgado este jueves, el cual destaca iniciativas exitosas de reducción de la ingesta de sodio como la registrada en Filadelfia.

En la ciudad del amor fraternal, el Departamento de Salud del estado trabajó en conjunto con 206 restaurantes para crear la iniciativa "Philadelphia Healthy Chinese Take-out" para crear recetas con niveles de sodio más bajos.

"La historia de Filadelfia muestra lo que puede hacerse, No se trata de renunciar a la comida que más le gusta, sino proveer opciones bajas en sodio que saben excelente", indicó el director de los CDC, Tom Frieden.

El reporte, en inglés y titulado "From Menu to Mouth: Opportunities for Sodium Reduction in Restaurants", apunta al hecho de que la mayoría de los estadounidenses comen afuera entre cuatro a cinco veces por semana y que solo en una de esas comidas pueden estar ingiriendo la cantidad de sodio recomendada para todo un día.

Según los CDC, los alimentos de restaurantes de comida rápida contienen en promedio 1.848 mg de sodio por cada 1.000 calorías y los platillos preparados en restaurantes más formales contienen en promedio 2.090 mg de sodio por cada 1.000 calorías.

De acuerdo con los CDC, cerca del 90 por ciento de los estadounidenses consume más sodio de lo recomendado para una alimentación saludable.

Los estadounidenses consumen un promedio de 3.300 mg de sodio al día, aunque las guías alimentarias recomiendan que se limite a menos de 2.300 mg al día.

"Cuando los restaurantes reconsideran la forma en la que preparan la comida y los ingredientes que eligen, las opciones más saludables se convierten en una rutina para los clientes", declaró Frieden.

Con el objetivo de reducir esta tendencia, los CDC han desarrollado diferentes iniciativas para que los departamentos de salud de los estados trabajen con los restaurantes en el desarrollo de estrategias para ofrecer opciones más saludables.

Además de fomentar la cooperación, las autoridades sanitarias recomiendan a los restaurantes brindar a los clientes información detallada sobre el contenido nutricional de los platos que ofrecen y dar opciones con poco sodio a precios bajos.