A unas semanas de reiniciar las clases a través de las escuelas en la ciudad, estudiantes de Olney Charter High School manifestaron ante miembros del personal administrativo, cuestiones que consideran deben cambiar en la institución.

El pasado 13 de agosto miembros de la organización Youth United for Change (YUC) y estudiantes de Olney se reunieron con Alfredo Calderon, CEO y presidente de ASPIRA Inc. of PA, y entregaron un listado de recomendaciones que consideran importantes para mejorar su desempeño escolar.

“Decidimos reunirnos con el señor Calderon porque hay muchas cosas en Olney que consideramos injustas y necesitan cambiar, y creemos que podemos llegar a un consenso”, dijo Sabrina Harris, estudiante de décimo grado en dicha institución.

Entre las recomendaciones se encuentra cambiar la política del uso de uniforme, la habilidad de que los estudiantes lleven su propio almuerzo, y cambios en cuestiones de disciplina y seguridad en las instalaciones. 

“Los uniformes son muy caros, y otro problema son las restricciones en su uso. Nosotros venimos de familias de clase trabajadora, muchos de nosotros no podemos costear todos los artículos del uniforme”, agregó Harris.

“No tenemos problema en portar el uniforme, sabemos que debemos hacerlo. Sin embargo pedimos que sea un uniforme más económico”, dijo Chikae Williamson, quien se graduó de Olney durante el último ciclo escolar. “Estamos muy limitados en nuestras opciones. Si no cumples con los reglamentos te envían a la casa. Los estudiantes están perdiendo educación por culpa de los uniformes”.

También actualmente se encuentra prohibido portar un teléfono móvil dentro de las instalaciones de la escuela. Una de las peticiones es poder almacenar los celulares en un sitio específico durante las horas de clases.

“Actualmente no creemos que sea seguro viajar de la casa a la escuela sin un teléfono celular. En el metro... en el bus, cualquier cosa puede pasar”, dijo Harris.

“Al final del día nosotros somos los que estamos siendo afectados. Él tiene el poder de ayudarnos”, dijo Williamson. “Si los estudiantes se sienten más cómodos y seguros en la escuelas, más estudiantes querrán asistir a las clases”.

Olney Charter High School comenzará clases el 31 de agosto, y según Calderon, durante la primera semana de orientación estudiantil se podrán abordar las peticiones de los estudiantes.

“Vamos a reunirnos nuevamente con ellos. Estos son temas que debemos discutir con el liderazgo en Olney. James Thompson es el nuevo director del high school”, dijo Calderon en entrevista con AL DÍA.

Agregó que una vez que se reanuden las clases, el nuevo director creará un concejo estudiantil. “Él estará comprometido a trabajar con los estudiantes y el concejo para que se puedan crear soluciones a estas preocupaciones”.

De entre las peticiones de los estudiantes, Calderon dijo que el cambio de uniformes es complicado, ya que es una política de la junta. “Los uniformes nos ayudan a identificar a nuestros estudiantes”, dijo Calderon. “Aseguran que son muy caros, pero nosotros contamos con un programa de apoyo para las familias que no puedan costearlos, también contamos con un closet de intercambio con donaciones de uniformes”.

En cuanto a la política del uso de teléfonos móviles, Emma Restrepo, coordinadora de comunicaciones de ASPIRA Inc. of PA, declaró que la posición de la organización es paralela a la del  Distrito Escolar de Filadelfia: “El uso de teléfonos móviles es una distracción perjudicial durante las horas de clases”.

Agregó que por otra parte, la implementación de un sistema de almacenamiento de más de 1.600 teléfonos, y su devolución diaria resultaría costoso y logísticamente imposible. “Haría a la escuela responsable de ellos durante su almacenamiento. Esto es una responsabilidad que no podemos asumir”, dijo Restrepo.