Si 90 por ciento del éxito de un equipo de pelota proviene del rendimiento de su pitcheo entonces los Phillies van a tener muchos retos esta temporada. 

El equipo de Filadelfia comenzó los campos de primavera con tres problemas serios en su rotación. 

Cole Hamels anunció que no estará listo para lanzar las primeras semanas de la temporada. El abridor zurdo de 30 años declaró que tuvo que limitar su entrenamientos en el invierno debido a tendinitis en el bícep de su brazo de pitchear. 

Hamels necesita más tiempo esta primavera para fortalecer su brazo y para ponerlo en forma para la nueva temporada. El dueño de la novena mejor efectividad (3.38) entre los lanzadores activos en la Gran Carpa, no se integrará a la rotación hasta finales de abril. Hamels tuvo marca de 8-14, 3.60, 202 Ks y 50 BBs en 220 entradas. Este necesitaba empezar bien el 2014 ya que comenzó el 2013 con problemas: perdió nueve de sus primeras 10 decisiones. 

Jonathan Pettibone, un abridor derecho de 23 años que debutó en las Grandes Ligas en el 2013, declaró la semana pasada que sufría de dolor en el hombro de su brazo de lanzar. Este tuvo que dejar de pitchear a fines de agosto el año pasado debido a inflamación en su hombro y 'cambios' en el labrum de dicho músculo. El espigado monticulista tuvo marca de 5-4, 4.04, 66Ks y 38 BBs en 100.1 entradas en el 2013. El equipo fue agresivo con el tratamiento del malestar y sometieron al pitcher a una inyección de cortisona la semana pasada. Pettibone no es un as como Hamels pero estaba supuesto a ser una de las piezas de repuesta principales de la rotación. Sin él, los Phillies no cuentan con la maleabilidad que requiere una rotación para manejar las dificultades que se presentan a lo largo del maratón que es una temporada de béisbol en las Mayores. 

Las dificultades de Miguel Alfredo González en mostrar control y velocidad significa que el lanzador cubano de 25 años no estará listo para ser parte de la rotación de los Phillies en abril. Los Phillies invirtieron $12 millones por año por tres temporadas en el lanzador derecho cubano, quien nunca ha jugado una entrada de béisbol profesional en EE.UU. Hubieron rumores que González no estaba completamente sano cuando Filadelfia lo contrató y por ende la oferta de un contrato de $48 millones por tres temporadas que se le extendió fue rescindida. 

Cuando los Phillies anunciaron la adquisición de González, la jerarquía lo pronunció listo para hacer un impacto de inmediato en la rotación. Ahora, la organización habla de tener paciencia con el pitcher. ¿Eso tiene sentido pero mientras tanto quien ocupará el puesto? ¿Hubiera tenido más sentido firmar a otro lanzador ya establecido en la Gran Carpa como Ubaldo Jiménez en vez de probar la suerte con un novato internacional? 

González tiene hasta el fin de los campos de entrenamiento para agarrar su chance. Su primera aparición esta primavera es contra los Yankees el sábado. El nativo de la Habana tiene un repertorio extenso de lanzamientos y las mañas, pero no es fácil hacer la transición a las Grandes Ligas y González no solo se está ajustando a su nuevo trabajo pero a una nueva forma de vida. Buena suerte Miguel.

Las adquisiciones de A.J. Burnett y Roberto Hernández, la buena salud de Cliff Lee y el desarrollo del prospecto Jesse Biddle son cosas positivas para la rotación de Filadelfia pero los Phillies aun tienen el reto de llenar los huecos en su rotación y de hacerlo con menos flexibilidad financiera.