No es un secreto que Filadelfia es una ciudad llena de amantes de la bicicleta (la Ciudad del Amor Fraternal es la urbe con mayor número de usuarios de este medio de transporte, entre las más pobladas), aunque desafortunadamente los ciclistas no son lo único que abunda en la ciudad; también lo hacen los baches y grietas en sus carreteras que hacen que recorrerla sobre dos ruedas sea una experiencia menos confortable de lo que debería.
Consciente de ello, en Redshift Sports, una compañía local fundada por tres ingenieros mecánicos que “también aman pedalear, los triatlones y básicamente cualquier deporte al aire libre” (según sus propias palabras), decidieron buscar una solución a este problema. Y parecen haberla encontrado.

La empresa ha desarrollado y creado ShockStop, un sistema que absorbe el impato que recibe el manubrio de la bicicleta. El objetivo es reducir el efecto que causa en la parte superior del cuerpo el paso de la bici sobre algunas de las imperfecciones que se encuentran en el asfalto, reduciendo además la vibración. 

Este aparato, pendiente de patente, necesita fondos para llevar a cabo su comercialización. Para ello, y como ya hicieron en anteriores ocasiones, la compañía ha lanzado una campaña en la plataforma Kickstarter que estará disponible del 25 de agosto al 30 de septiembre. Y de momento ya han conseguido bastante apoyo. Tan solo unas horas después de su lanzamiento, más de 60 personas se habían sumado a ella, donando cerca de $6.000 de los $25.000 que Redshift Sports necesita.

Si usted quiere contribuir puede hacerlo visitando kickstarter.com.