Este jueves, los asesores de vacunas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) respaldaron la administración de la dosis de refuerzo de la vacuna contra el covid-19 de Pfizer a personas de 65 años o más que residen en centros de atención a largo plazo y a ciertas personas con afecciones subyacentes.

 

Los asesores votaron por unanimidad para recomendar una sola dosis de refuerzo de la vacuna Pfizer/BioNtech contra el covid-19 para personas mayores de 65 años al menos seis meses después de haber sido vacunados por completo.

 

Los asesores también votaron 13-2 para respaldar la administración de la dosis de refuerzo de la vacuna contra el covid-19 de Pfizer a personas de 50 a 64 años con afecciones médicas subyacentes.

 

La decisión de vacunar a este grupo de la población se debe a un análisis de los CDC que mostró que era mucho más beneficioso administrar una dosis de refuerzo a las personas de 65 años o más que a las personas de grupos de edad más jóvenes.

 

Una vez que la directora de los CDC, Rochelle Walensky, apruebe las recomendaciones del comité asesor de esa agencia, las personas que cumplen los criterios señalados podrían empezar a recibir las dosis de refuerzo de forma inmediata, informó el diario The New York Times.

 

Esas recomendaciones se dan acorde a las aprobadas previamente por el comité de asesores de la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA), que respaldó la administración de terceras dosis de Pfizer para las personas mayores y la población de alto riesgo.

 

La mayor diferencia entre lo aprobado por los CDC con respecto al FDA radica en que el segundo respaldó la idea de proporcionar dosis de refuerzo a las personas cuyo empleo supone una especial exposición potencial al virus del Covid-19, como los médicos y enfermeros, profesores o empleados de supermercados.

 

En cambio, el comité de los CDC rechazó esa idea de administrar una tercera dosis a los grupos que puedan enfrentar mayores riesgos debido a la naturaleza de su trabajo.