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Mayor Kenney's sweetened beverage or "Soda Tax"was ruled as legal in court on Monday. Photo: Thinkstock Photos

Un tribunal pone en marcha el Impuesto sobre la soda

Mayor Kenney's sweetened beverage or "Soda Tax"was ruled as legal in court on Monday.

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Con la aproximación del 1ero de Enero, el impuesto sobre la Soda o “bebida endulzada” del Alcalde Kenney, ha sido aprobada por la Corte de Asuntos menores de Filadelfia. El juez Gary S. Glazer despachó el caso por completo el día lunes, semanas antes de la promulgación del impuesto.

La demanda fue introducida por la Coalición de Filadelfianos Contra los Impuestos de Comestibles, un grupo que luchaba contra el impuesto de la bebida endulzada. “Más de 30.000 filadelfianos y más de 1.600 negocios y organizaciones locales se han unido para declarar que este impuesto apunta injustamente a las familias trabajadoras y a los pequeños negocios”, dijo el grupo en una declaración publicada recientemente.

Aunque el grupo ha dictaminado que el impuesto afecta negativamente a las familias y a los pequeños negocios, otras familias lo han percibido como algo positivo, pues presuntamente limitaría la disponibilidad de bebidas y conllevaría a una educación más accesible.

El impuesto está dirigido a distribuidores que deben para 1.5 céntimos por onza, que es actualmente pagado tan sólo por los distribuidores de la bebida, muchos de los cuales se han registrado en la ciudad de manera de que el impuesto pueda ser pagado en la fecha límite del 20 de Febrero.

La plataforma de elección de Kenney se ha sustentado en el incremento de la expansión de programas educativos previos al jardín de infancia, auspiciados por el impuesto de la soda que el Alcalde Nutter había propuesto pero que nunca fue aprobado. “Nuestros niños no pueden esperar”, dijo Kenney en una aparición en la Escuela Ludlow en Kensington. “Han esperado muchas generaciones por esto. Avanzaremos para cambiar las narrativas de pobreza y miseria en esta ciudad”.

“El Distrito Educativo de Filadelfia provee servicios educativos preescolares a un aproximado de 9.500 niños en edad y condición económica específicas, a través de sus programas Head Start y Pre-K Counts/Bright Futures, así como también a través de una asociación con agencias de educación sencilla basadas en la comunidad”, determinó el reporte del Distrito Educativo de Filadelfia, haciendo referencia a su presupuesto para el año escolar 2016-2017.

Pero de acuerdo con Pre-K for PA: “incluso con los aumentos recientes en fondos estatales, existen 112.900 niños elegibles que clasifican para obtener educación de alta calidad con financiamiento público, pero permanecen desatendidos” explica el sitio web.

El Alcalde Kenney ha reportado que 1.700 estudiantes se registraron para los nuevos 2000 puestos preescolares. Con el número reportado por Pre-K for PA, el rango de estudiantes desatendidos se verá mermado lentamente cuando los fondos de la ciudad y del impuesto de la soda ingresen.

Un anuncio durante el mes de octubre por parte de la Oficina de Educación de la Alcaldía, estimó que 10.2 millones de dólares serían donados a la ciudad a 61 centros de educación temprana que manejan 78 instituciones por toda Filadelfia. Y el impuesto de la soda sería un suplemento a ese ingreso.

 

Sin embargo, la Coalición de Filadelfianos contra el Impuesto de Comestibles ha determinado que continuarán su lucha contra el impuesto a pesar de los deseos del Alcalde porque se detengan. “Continuaremos oponiéndonos a este impuesto discriminador y regresivo, que no es una fuente de ingresos sustentable para apoyar iniciativas importantes como los programas preescolares”, reza la declaración.