El martes 14 de julio, la ciudad de Asheville tomó una decisión sin precedentes para proporcionar las llamadas compensaciones históricas a sus residentes negros y sus descendientes.

El Consejo Municipal emitió una disculpa en nombre de toda la ciudad, por el papel histórico de Asheville en la esclavitud, la discriminación racial y la retención de los derechos básicos de su comunidad negra.

La votación 7-0 fue aprobada el martes por la noche, después de una declaración de que el racismo es un problema de salud pública por la junta de salud pública del condado unos días antes.

Las reparaciones vendrán en forma de inversiones en áreas donde los residentes negros se enfrentan a la desigualdad.

"Las prioridades presupuestarias y programáticas resultantes pueden incluir, pero no se limitan a aumentar la propiedad de viviendas de las minorías y el acceso a otras viviendas asequibles, aumentar la propiedad de negocios y las oportunidades de carrera de las minorías, estrategias para aumentar la equidad y la riqueza generacional, cerrar las brechas en la atención de la salud, la educación, el empleo y el pago, la seguridad del vecindario y la equidad con la justicia penal", dice la resolución.

También pide a la ciudad de Asheville que cree una Comisión de Reparaciones Comunitarias, compuesta por grupos comunitarios y otros gobiernos locales, que se centrará en la creación de programas y recursos.

"Simplemente no basta con retirar las estatuas, los negros de este país están lidiando con asuntos de naturaleza sistémica", dijo Keith Young, uno de los dos miembros negros del Consejo de la Ciudad de Asheville.

El tema de las reparaciones no es nuevo, pero ha resurgido recientemente después de que la nación estallara en protestas por la justicia racial. Es una de las varias demandas que buscan los manifestantes que tratan de abordar los 400 años de opresión a la que se han enfrentado los negros estadounidenses. 

Esta decisión se produce cuando otros estados están empezando a buscar formas de lograr la reconciliación de sus propios legados en la esclavitud de los Estados Unidos y los decenios de opresión racial. 

En Rhode Island, el miércoles, el alcalde Jorge Elzorza de Providence firmó una orden ejecutiva que compromete a la ciudad a un proceso de verdad, reconciliación y reparaciones municipales para los negros, los indígenas y las personas de color en Providence. 

Elzorza señaló que este paso no borrará las generaciones de dolor y violencia infligidas a estos residentes, pero es un paso hacia la curación de "algunas de las heridas más profundas que nuestro país enfrenta hoy en día". 

"Que este proceso de verdad nos aporte educación y conciencia sobre estos actos erróneos y que nuestra reconciliación cambie los sistemas que siguen oprimiendo a nuestras comunidades, reafirmando al mismo tiempo nuestro compromiso de construir un futuro más brillante e inclusivo", dijo.