El año en que el mítico cantautor Joan Manuel Serrat anunció que se retirará definitivamente de los escenarios, su carrera sigue acumulando triunfos. Y el de ayer fue uno de los grandes: la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio, entregado en mano por Pedro Sánchez, el presidente del gobierno español.

“Estoy emocionado y muy feliz al mismo tiempo”, proclamó Serrat tras recibir el prestigioso galardón, apenas dos meses antes de iniciar su tour de despedida, que arrancará el 27 de abril en Nueva York. Lo que más satisfacción produjo al músico fue el reconocimiento que recibió frente a sus hijos.

“Más allá de ver en casa a un ser humano en calzoncillos, y tantos años en su vida viéndome en situaciones tan desconcertantes, ahora saben que hay una persona que ha trabajado y ha hecho otras cosas”, expresó durante el acto celebrado en el Palacio de la Moncloa, en Madrid.

Entre las risas de los asistentes y del presidente español, Serrat apuntó que este título se suele conceder a “gente ya mayor y a punto del retiro”. El músico reconoció que no tenía constancia de quienes fueron los anteriores galardonados, y cuando buscó en internet, se percató de que todos eran grandes amigos suyos: Álvaro Mutis, Fernando Fernán Gómez, Conchita Velasco o José Luis Cuerda. “Trataremos de ser un poco como ellos”, afirmó.
 

Por su parte, el presidente Sánchez comentó que “la cruz que hoy imponemos es para un niño eterno a quien llamaremos a partir de ahora excelentísimo. Excelentísimo poeta, escritor, letrista, música y ciudadano”. Y prosiguió: “queremos acompañarte en este viaje, y esta medalla es el símbolo del inmenso cariño que te profesamos”. Para el presidente español, las letras del cantante han inspirado valores que “ahora deberíamos reivindicar”, como son la convivencia, la libertad y el amor por la cultura.

“El valor de tu contribución es haber ido más allá de lo puramente literario o artístico, y demostrar que la poesía es un arma cargada de futuro”, consideró Sánchez. Además, puso en valor su contribución para reivindicar la diversidad lingüística existente en el estado español. “Nuestra historia ha sido cantada por ti”, concluyó.

Su gira de despedida, titulada “El vicio de cantar 1965-2022”, terminará en Barcelona el 23 de diciembre. Según las palabras del artista de 77 años, ha querido programar esta gira para "despedirme personalmente del público con el que he compartido vida y canciones durante más de medio siglo. No me gustó sentirme despedido por una plaga”.