La toma de posesión de los demócratas Biden y Obama coincidieron en varias cosas. Entre ellas, la representación de la diversidad del país, los discursos que reivindican la inclusión e integración y las artes como ‘late motiv’. 

En ambos actos,muchos músicos y artistas se sintieron honrados de ser parte de la ceremonia de cambio de mando apoyando a los presidentes electos, y en ambos momentos históricos, siguiendo los pasos de otros demócratas, los presidentes invitaron a poetas para que retrataran con palabras la sensación de esperanza que envolvía a todos en una nueva etapa.

Richard Blanco, a sus 44 años, se convertía en el primer poeta inaugural de origen hispano y abiertamente gay en participar en la ceremonia de investidura de un presidente en el Capitolio.

El poeta de origen cubanoamericano recitó “Un hoy” rindiendo  homenaje al legado de los inmigrantes, a la diversidad en Estados Unidos y al compromiso comunitario del país.

"El lenguaje es importante, lo hemos aprendido en estos últimos cuatro años. La poesía entiende realmente eso y utiliza el lenguaje para hacernos sentir y pensar en las cosas de forma nueva”, dijo Blanco -en el último periodo, hemos sido espectadores de cómo hacer apología del odio puede calar en las sociedades y abrir camino a situaciones de violencia legitimadas por aquellos que usan el lenguaje desde el odio. 

Es así como el poeta afirma que el uso del lenguaje y la poesía desde la trinchera contraria puede ayudar a curarnos. Propone construir "puentes de empatía" a través de la poesía. 

Cuando se refiere a la joven Amanda Gorman, la joven poeta que participó en la Investidura del Presidente Joe Biden, el poeta resalta honestidad con la que Amanda aborda los problemas del país, y cómo su poesía ‘eleva’ la mente y el espíritu para afrontar y superar estos problemas.

“The Hill We Climb" fue un emotivo reconocimiento del dolor del pasado de Estados Unidos y de la promesa de su futuro. Un poema que ofreció esperanza, autocrítica y autoperdón al país.