A sus 60 años, Alfonso Cuarón se ha convertido en una referencia en la industria cinematográfica mexicana y latinoamericana. Sus filmes han logrado un gran éxito tanto comercial, como personal. Convirtiéndose en el primer director mexicano en hacerse de un Óscar tras una carrera que se mueve entre el cine comercial de historias encargadas y relatos propios en los que dejó su voz personal como cineasta.

Cuarón se llevó el Óscar a mejor director en 2013 con “Gravity” y repitió en el 2019 con “Roma”.Tras ambos logros, parece que al director, productor y guionista le espera un camino más relajado y creativo. “Si la medida de la gente es el Óscar, con ‘Gravity’ (2013) Cuarón lo logra a nivel del cine norteamericano, pero si lo ves en un contexto más artístico y como director formal y personal, con ‘Roma’ también lo cumple. Yo creo que ahora está en su mejor momento” contó el crítico de cine Silvestre López Portillo en una entrevista con Efe. 

Pero Cuarón ya había llamado la atención y se hizo un nombre en el cine mexicano e internacional en 2001 con “Y tu mamá también” protagonizada por la dupla Diego Luna y Gael García junto a  Maribel Verdú. A pesar de que luego continuó con su trabajo, este filme sigue siendo considerado una de sus mejores obras.

Filósofo de profesión por la Universidad Nacional Autónoma de México, no dejó de lado su pasión por el cine, y buscó la especialización en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), aunque más tarde abandonó la escuela.

El sello marcado de Cuarón se repite a lo largo de su filmografía, su exploración a partir de la cámara y su claro y marcado interés social son plasmados en sus narraciones. Tras esta larga trayectoria, el futuro de Alfonso Cuarón parece relajado y experimental para sus obras.

“Está en un momento en el que se está dando el lujo de tomarse su tiempo, de ponerse más creativo, pero yo creo que lo único que le podría faltar ahora es lograr alguna Palma en Cannes. Tal vez regrese a ese cine de desmadre en el que no tiene que demostrar que es un gran contador de historias”, afirma López-Portillo.