James Newman hace 40 años propuso a su colega, el Dr. Viktor E. Frankl, edificar la Estatua de la Responsabilidad en la parte este de Estados Unidos para complementar la Estatua de la Libertad de la costa oeste en Nueva York. Formaron un comité y, aunque Viktor Frankl ya ha muerto, el proyecto sigue vivo.

La gran estatua busca ser la inspiración para el mundo en un llamado a la unidad, la fraternidad, la cooperación, como resultado de una libertad responsable. Es fácil hablar de libertad, pero difícil de responsabilidad. Frankl sostenía que el hombre es un ser libre, cuya motivación primaria no es el instinto de placer, ni el afán de poder, sino la voluntad de encontrar un sentido a la vida. Un compromiso noble o un ideal sano son capaces de orientar toda la existencia; en cambio, mirarse sólo a uno mismo neurotiza.

Libertad y Responsabilidad. ¿Compañeras irreconciliables? Para la mente actual parecen contradictorias y, sin embargo, están íntimamente unidas. No puede haber libertad sin responsabilidad. No castigamos a un árbol porque no se quitó del camino cuando nos fuimos a estrellar contra él. El árbol no tiene ninguna responsabilidad porque no es libre. Ser responsable significa responder, rendir cuentas de nuestras acciones a alguien con quien estamos comprometidos: Nuestra conciencia. Asumir las consecuencias de nuestras acciones: ¿Por qué querer disfrutar los beneficios de la libertad sin tener qué cargar responsablemente de las consecuencias? 

Nos dicen las Escrituras que Dios creó al hombre a imagen y semejanza Suya. El ser humano ha sido llamado a ser libre, ciertamente, pero también a ser responsable de su herencia biológica, psicológica y sociológica, y a ir liberándose en cada paso de aquello que lo inhibe para alcanzar sus metas. Dentro del marco de su existencia, de su tiempo y de su espacio, cada ser humano es insustituible, y por lo tanto responsable de la conformación de su destino. Para conformarlo está solo en todo el universo: Nace solo y muere solo, su destino no se repite. Nadie vendrá al mundo con las mismas posibilidades que él. Ni él mismo volverá a tenerlas.

El ser humano se asemeja al escultor que con el cincel y el martillo esculpe la piedra de tal modo que el material se convierte cada vez más en forma. Posee la capacidad de transformar su herencia en una gran obra; dispone de un determinado plazo para terminarla, y desconoce el plazo en que deberá entregarla. 

Esto lo acucia a aprovechar bien el tiempo para no exponerse al riesgo de que su obra quede inconclusa. Pero ni aún el hecho de no terminarla, priva a la obra de su valor. Son muchas las sinfonías inconclusas que figuran entre las más bellas; no importa tanto que el trabajo llegue a terminarse como que sea valioso.

La Estatua de la Responsabilidad que se tiene proyectada será de 91 metros de acero inoxidable, con un costo aproximado de 300 millones de dólares en donaciones privadas. La estatua será la visión del Dr. Viktor Frankl que está en proceso de hacerse realidad. El modelo consiste en dos manos entrelazadas, simbolizando la responsabilidad que viene con la libertad. La Fundación de la Responsabilidad es un proyecto no lucrativo cuyo objetivo es motivar a las presentes y futuras generaciones a ejercer una libertad responsable. 

En 1982 Octavio Paz escribió. "Sin libertad la democracia es despotismo, sin democracia la libertad es una quimera". Recordar estas palabras cobra un significado especial en los tiempos que hoy vivimos; nos llevan a la reflexión profunda de lo que debe ser la libertad y la dignidad dentro de nuestra democracia. La libertad es, sin duda, uno de los logros más significativos que nos ha dado la democracia: libertad de educación, de trabajo, de pensamiento, de expresión. El mundo experimenta uno de los momentos más intensos de su historia; hoy es posible que la justicia e igualdad sean posibles; las libertades se han ampliado abriéndonos las puertas a la participación, y a la capacidad de decidir por nosotros mismos.

Si optamos por la libertad, asumimos todas sus ventajas y sus riesgos. El concepto moderno de libertad nos señala que ésta no puede ser irrestricta porque es una fuerza tremenda que requiere ser encauzada: a mayor libertad, mayor responsabilidad.