La elección de Barry Larkin al Salón de la Fama y los anuncios de los retiros de Pedro Martínez y Jorge Posada me hicieron pensar sobre los próximos latinos que no tendrán dificultad en llegar a Cooperstown. 

El pabellón anunció el lunes que un comité compuesto de cronistas eligieron por un margen de 86.4% de los 573 votos a Larkin para integrar este verano al salón de los inmortales del béisbol profesional estadounidense. 

Larkin se merece dicho honor ya que fue el Jugador Mas Valioso del Viejo Circuito (1995); recibió el Premio Roberto Clemente (1993); participó en 12 Juegos de Estrellas; ganó 9 bates de plata; y acaparó 3 Guantes de Oro como el campocorto de los Rojos por 19 temporadas (1986-2004). El nativo de Cincinnati guió al equipo de su ciudad natal a un campeonato mundial cuando los Rojos sorprendieron a los Atléticos en 1990. 

Larkin fue el único de los 27 peloteros en la papeleta que recibió más del 70% de los votos de los cronistas. 

Los nombres de peloteros que recibieron menos de 5% de los votos son removidos de la papeleta de los cronistas en años futuros. Uno de los 13 candidatos en no recibir por lo menos 5% de los votos este año fue Juan 'Igor' González. El nombre del dos veces Jugador Más Valioso de la Liga Americana (1996 y 1998) se calló de la papeleta en su segundo año de elegibilidad. 

Tres latinos se mantuvieron en la lista: Edgar Martínez (36.5%); Rafael Palmeiro (12.6%); y Bernie Williams (9.6%). 

El número de latinos en la papeleta aumentará en el 2013 con la adición de Sammy Sosa, Roberto Hernández, Julio Franco, Sandy Alomar, Tony Batista, y Antonio Alfonseca.  

La papeleta del 2013 relucirá la controversia de los esteroides porque además de contar con Sosa, Mark McGwire (7 años en la papeleta), y Palmeiro (3 años en la papeleta) tendrá por primera vez el nombre de Barry Bonds.

La caída de Igor es un ejemplo de lo difícil que es el camino a Cooperstown para peloteros que jugaron en la era de los esteroides (1994-2010). 

Por eso fue que los anuncios del retiro de Pedro en diciembre y el de Posada esta semana me pusieron a pensar que ellos serán los dos jugadores latinos que más fácilmente pasaran por los portales de Cooperstown en un futuro no muy lejano. Posada y Pedro no serán elegibles para integrar la papeleta hasta el 2014 y 2015 respectivamente. Los peloteros tienen que esperar que pasen cinco temporadas sin jugar en las Mayores para ser elegibles.

A Edgar no se le ha acusado de haber usado substancias prohibidas pero existe mucho prejuicio contra su exaltación porque principalmente se desempeño como bateador designado. 

Pedro entrará sin problemas porque él se lució frustrando a los monstruos de la era de esteroides sin usar substancias prohibidas. Algo que Roger Clemens quien integrará la lista por primera vez en el 2013 no tiene credibilidad en pronunciar. 

Posada nunca fue seleccionado Jugador Más Valioso de su liga, no lideró su circuito en promedio, jonrones, o remolques, nunca recibió un Guante de Oro, pero si ganó 5 bates de plata, fue seleccionado para participar en 5 Juegos de Estrellas y sus Yankees capturaron 5 campeonatos mundiales. Posada terminó su carrera entre los mejores 10 en la historia de los Yankees en dobles, jonrones, y juegos detrás del plato.

En el caso de Posada, los prejuicios son favorables ya que este jugó en la metrópoli de la Gran Manzana, no uso esteroides, y siempre fue un caballero con la prensa.