Los latinos hoy controlan el poder para inclinar la balanza en las elecciones de medio término, despidiendo a notorios candidatos anti-inmigrantes tales como Tom Tancredo en Colorado, y Meg Whitman en California.

La sombra del electorado latino pesa incluso sobre otros anti-inmigrantes que sí ganaron como la gobernadora de Arizona Jan Brewer.  En ese estado Brewer supuestamente incluso "se ganó el 28% del voto latino" según las encuestadoras nacionales pero según 'Latino Decisions' una encuestadora independiente enfocada en hispanos, Brewer "ultimadamente solo consiguió el 14% del voto".

A los votantes hispanos se les reconoce el crédito de salvar la mayoría Demócrata en el Senado.

En nevada específicamente, el líder de la mayoría en el Senado Harry Reid se salvó con el 90 por ciento del voto hispano en su favor.  El voto de minorías supuestamente baja durante las elecciones de medio término, pero la presencia hispana no solo se mantuvo en California, pero incluso creció en estados como Nevada al 22 por ciento, de un 18 en el 2008.

En Colorado el Demócrata Michael Bennet con las justas superó al candidato del "Tea Party" Ken Buck con una mayoría estrecha -47.8 sobre 46.8 por ciento- gracias a un decidido voto hispano en su favor del 81 por ciento.

"Las encuestas nacionales de elecciones, sistemáticamente subestiman la participación del voto latino y afro-americano" según 'Latino Decisions'.

Mientras que los 'exit polls' estimaban el voto Latino a favor de los Demócratas en 64 por ciento, 'Latino Decisions' revela mas bien un 75 por ciento, significativamente superior según datos recogidos de Arizona, California, Colorado, Florida, Illinois, New Mexico, Nevada, y Texas.

En California las encuestas electorales sugieren que la candidata anti-inmigrante a gobernadora Meg Whitman supuestamente recibió 30 por ciento del voto latino, sin embargo 'Latino Decisions' lo "estimó en tan solo 13%".

Tres candidatos Latinos por el partido Republicano obtuvieron victorias estatales, en New Mexico Susana Martínez y en Nevada Brian Sandoval llegaron a la gobernación, y en Florida Marco Rubio ganó la carrera por el Senado estadounidense con 55% de votos hispanos.

Según el experimento de Florida ¿bastará una fachada hispana para conquistar el voto latino a nivel nacional?  Una agenda centrada solo en la represión de inmigrantes continuará catalizando un contundente voto hispano en la dirección opuesta.