El futuro de Filadelfia, en Romero y Bastardo
Para los seguidores de los Phillies el 2010 ha sido marcado por ciclos de algarabía, miedo, alivio, y terror.
El comienzo fuerte del equipo (26-16) hizo a muchos pensar que iba a ser fácil para los Phillies repetir como campeones del Viejo Circuito pero la mala racha de bateo en mayo y junio aterrorizó a los aficionados y derribó al equipo de su pedestal.
El juego perfecto de Roy Halladay le inyectó felicidad a la Ciudad del Amor Fraternal, pero la epidemia de lesiones que causó en un mismo mes la ausencia de Ryan Howard, Chase Utley, y Shane Victorino probó la fe de los fanáticos en su novena.
La subsiguiente habilidad de Raúl Ibáñez, Placido Polanco, y Carlos Ruiz de propulsar la ofensiva ante tantos desastres alivió el temor, pero el trabajo errático del taponero Brad Lidge tiene a muchos en Filadelfia sufriendo de esquizofrenia.
La ascensión de Domonic Brown y la adquisición de Roy Oswalt volvió a calmar los nervios, pero ahora los fanáticos están molestos con las dificultades de JC Romero y Antonio Bastardo, los únicos relevistas zurdos en el roster del equipo.
Romero permitió cinco carreras en tres salidas entre el 5 y el 10 de agosto.
Bastardo fue ascendido a los Phillies el lunes para darle una mano a Romero ante los bateadores zurdos, pero no lució bien en su primera salida (tres hits y una carrera en dos tercios de labor contra los Dodgers, el martes) no obstante haber disfrutado de 10 entradas perfectas y tres rescates en sus últimas 10 entradas en Triple A.
Los fanáticos están nerviosos porque los Phillies no cuentan con otros relevistas zurdos. Mike Zagurski (siete carreras en sus últimas 10 entradas de relevo) y Joe Savery (1-10, 5.09) de la sucursal de Triple A en Allentown y Sergio Escalona (1-1, 4.76 en sus últimas 10 salidas) y Matt German (1-1-, 4.38 en 37 entradas) de la sucursal de Doble A en Reading no han lucido bien. Tratar de subir a un relevista de Clase A a la Gran Carpa no es una opción porque es un gran salto no importa el talento que tenga el muchacho.
El jugador Romero dice que no está lesionado y que es cuestión de su mecánica.
Bastardo no quiere que lo juzguen a base de su primera salida en agosto.
La gerencia de los Phillies dice que buscar ayuda de afuera para resolver su dilema con sus relevistas zurdos no será una solución no obstante el equipo estar a ocho semanas del final de la temporada y la ruta ser como la de todas las montañas rusas: lo más escalofriante se reserva para el último tramo. Filadelfia enfrenta a los Bravos en seis de sus últimos 12 encuentros del año y los dos equipos concluyen su temporada con una serie de tres juegos en Atlanta.
Como manejen los Phillies la recta final dependerá mucho de las actuaciones de un boricua (Romero) y un dominicano ( Bastardo). El dúo de relevistas zurdos caribeños tienen que recobrar su forma para que los Phillies puedan proseguir con su peregrinaje a la postemporada y a una tercera aparición en el Clásico de Otoño.
Los Phillies encontraron maneras de resolver sus otros dilemas veremos como lucen nuestros paisanos ante una prueba tan importante.
Filadelfia enfrenta a los Mets en Nueva York este fin de semana y luego batallan, en casa, a los Gigantes, los líderes en la carrera por el comodín del Viejo Circuito, el martes, miércoles, y jueves.
LEAVE A COMMENT:
Join the discussion! Leave a comment.