Desde el género o la raza hasta la alimentación, el nivel socioeconómico o el acceso al cuidado médico. La lista de factores que condicionan la esperanza de vida de un país es larga y depende de situaciones y parámetros de riesgo de lo más variados, que en muchas ocasiones no son considerados como tal por su población. En países como México, uno de ellos es la violencia de la guerra contra la droga.

Así lo revela un reciente estudio (publicado en Health Affairs y realizado por José Manuel Aburto, Hiram Beltrán-Sánches, Víctor Manuel García-Guerrero y Vladimir Canudas-Romo) que analiza la evolución de la esperanza de vida en México.

El estudio recoge un aumento progresivo de la esperanza de vida en las seis décadas previas al 2005 en 30 de los 31 estados mexicanos. Una tendencia que se invierte entre el 2005 y el 2010, ya que los datos demuestran que desde entonces la esperanza de vida ha descendido en todos ellos.

Sin embargo, esta tendencia no es igual en ambos sexos. Mientras la de las mujeres aumenta (aunque de manera más lenta), la de los hombres se ha reducido 7 meses entre 2000 y 2010.

Uno de los factores a los que se achaca esta reducción de la esperanza de vida masculina es la guerra contra el narcotráfico, intensificada en el año 2006 y representada con un aumento del ratio de homicidios nacional del 9.5 por cada 100.000 habitantes del 2000 al 22 por cada 100.000 habitantes registrado en 2010. Los investigadores señalan que la mayoría de las víctimas de la guerra contra el narcotráfico son varones.