La relación entre la Administración Trump y la comunidad Latina está más que deteriorada. Sin embargo, existe un porcentaje importante de hispanos en Estados Unidos que siempre han apoyado al neo-político.

A pesar de su campaña política contra los inmigrantes y contra las “laxas” políticas de inmigración de gobiernos precedentes, Trump recibió un apoyo del 54% de la comunidad hispana en Florida, según datos del Pew Research Center.

Fue precisamente en ese estado dónde surgió su encargada de prensa para los medios Latinos y Afroamericanos, Helen Aguirre Ferre, quien se incorporaría a su campaña desde el 2016 y a su equipo en la Casa Blanca después de su victoria.

Nacida en Miami, e hija de inmigrantes nicaragüenses, Aguirre fue presentadora de un programa de televisión sobre asuntos locales en el sur de Florida, según recuenta Univisión, habiéndose transformado en “una voz hispana muy respetada” en la región, antes de sumarse al gobierno de Trump.

Durante la gestión de Aguirre, la Casa Blanca desactivó la versión en español de su sitio web, y la comunicación con las plataformas de comunicación Latinas ha sido escasa, reduciéndose a grupos puntuales como Latinos for Trump, y medios pro-Republicanos.

Sin embargo, y de manera silenciosa, Aguirre ha renunciado a su cargo en la Casa Blanca durante la semana pasada, y varios reportajes indican que se dirigiría ahora a trabajar con el National Endowment for the Arts (NEA).

La comunicadora se suma ahora a Carlos Díaz-Rosillo, ex asistente adjunto del presidente y director de política y coordinación interinstitucional, transformándose en los Latinos que han abandonado el barco Trump para trabajar con agencias federales “creadas en la década de los 60 y a las que Trump ha propuesto acabarles el financiamiento”, según continúa el medio.

Muchos consideran esta una señala inequívoca del hermetismo de la Administración Trump frente a los asuntos Latinos, en especial cuando la comunicación se ha vuelto tan importante para la política nacional.

Y pareciera que habláramos de obviedades, pero ante la circunstancia política actual – entre oleadas de izquierda que retoman terreno en las primarias y un Partido Demócrata que reformula su estrategia para alcanzar el voto latino – el cierre de canales de diálogo entre la Casa Blanca y la comunidad hispana podrían afectar el resultado definitivo de las elecciones de mitad de período el próximo mes de noviembre.

Aún así, y según reportó The Associated Press, aún quedan algunos Latinos al lado del presidente, entre ellos Mercedes Schlapp (Directora de Comunicaciones Estratégicas), Jennifer Korn (asistente especial y sub directora de la Oficina de Asuntos Públicos), y Juan Cruz (Sub Director para Asuntos del Hemisferio Occidente).