El Sindicato de Trabajadores del Campo (UFW) anunció hoy la campaña "Tomen Nuestros Empleos", que busca convencer a estadounidenses desempleados de que realicen trabajo en el campo para reemplazar a campesinos indocumentados.

"Es importante que la gente que dice que los problemas económicos en el país son por causa de los trabajadores inmigrantes vengan a trabajar al campo para que vean la realidad que enfrentamos en la industria de la agricultura", dijo en conferencia de prensa telefónica Arturo Rodríguez, presidente de UFW.

"El punto de nuestra campaña es que queremos retar a la clase política, tanto demócratas como republicanos, para decirles que los campesinos inmigrantes no están quitándole el trabajo a nadie", aseguró.

La campaña "Tomen Nuestros Empleos", anunciada desde la base central de UFW en La Paz, California, consta también del envío de cartas a senadores y congresistas para hacerles saber que el sindicato tiene a disposición un equipo de campesinos dispuestos a entrenar en las faenas del campo a cada uno de sus constituyentes que quieran reemplazar a los campesinos inmigrantes.

"Hay una realidad y es que los hacendados necesitan más trabajadores y los campesinos se van de regreso a sus países porque pasan los años y nunca pueden arreglar su estatus migratorio", destacó el líder de UFW.

"Por eso hoy lanzamos esta campaña para buscar esa fuerza laboral que hace falta entre ciudadanos y residentes y vamos a esperar a ver qué pasa", dijo Rodríguez, quien invitó a buscar empleo a través del sitio en internet: www.takeourjobs.org

Robb Williams, director del Proyecto de Justicia para los Campesinos Inmigrantes, indicó que de acuerdo con la encuesta nacional de trabajadores de la agricultura en el campo laboran alrededor de 2,5 millones de campesinos.

"En la misma encuesta el 50 por ciento de los encuestados indicó que no tienen documentos, lo que nos lleva a deducir que más de 1,2 millones de campesinos necesitan regularizar su situación migratoria", explicó Williams.

Williams indicó que el 35 por ciento de los campesinos inmigrantes trabajan en el Valle Central de California, que es una de las regiones donde se cultiva gran parte de las frutas y vegetales para todo el país y el resto, principalmente, en los campos de los estados de Florida, Washington, Texas, Oregon y Carolina del Norte.

"Y es duro encontrar esos trabajadores, los cuales el 75 por ciento no han nacido en EEUU, porque en el campo los campesinos ganan como 50 por ciento menos que en otros trabajos fuera de la industria de la agricultura", reveló Williams.

"Y debido a que el trabajo es por temporadas, en algún momento del año muchos campesinos quedan desempleados", aseguró.

Por su parte, Michael Rubio, supervisor del condado de Kern, aseguró que los políticos que impulsan leyes contra los trabajadores inmigrantes desconocen las condiciones de trabajo, y de peligro, bajo las cuales se ganan el pan de cada día los campesinos inmigrantes.

"La realidad es distinta cuando se mira desde una oficina con aire acondicionado que en el campo donde las altas temperaturas en verano sobrepasan los tres dígitos", aseguró Rubio.

"Con esta campaña muchos pueden pensar que estamos retando al sistema establecido, ¡sí es cierto!, los estamos retando a que vengan a trabajar al menos un día para que aprendan sobre lo valiosas que son estas personas que siembran y cortan los vegetales que comemos cada día", puntualizó.

Rodríguez dijo también que con el fin de hacer circular el mismo mensaje con clave de humor, el próximo 8 de julio se presentarán en el 'Colbert Show', del canal por cable Comedy Central, en donde van a decirle al mundo que si no se aprueba una reforma migratoria y los campesinos son deportados, entonces van a surgir serios problemas para suplir de alimentos a todo el país.