Después de que Estados Unidos apoyara la “significativa participación” que Taiwan debería tener en la ONU, China ha dicho que el país no tiene derecho a unirse a la organización. Ha tildado la defensa de Estados Unidos de “afrenta flagrante”. Taiwan había manifestado recientemente a Estados Unidos su deseo de tener algún tipo de rol en la ONU. 

Pero China niega ese derecho. El portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwan en Beijing, Ma Xiaoguang lo expresa así: "Naciones Unidas es una organización intergubernamental compuesta por Estados soberanos. Taiwan es parte de China". La isla tuvo un asiento en la ONU hasta el 25 de octubre de 1971, cuando se votó su salida a favor de la entrada de la República Popular China. Eran los ganadores de la guerra civil de 1949 que terminó con el gobierno republicano exiliado en Taiwan. 

El martes pasado se conmemoraron los 50 años de China en la ONU. Entonces, el secretario de Estado Anthony Blinken, lamentó que Taiwan esté cada vez más excluida de la comunidad internacional y abogó por su integración. “No es un tema político, sino pragmático”, añadió. 

Aunque Taiwan ha ido aumentando su participación en la ONU a lo largo de los años, China siempre ataca cualquier acercamiento entre Taipei y Washington. En este último enfrentamiento, el gigante asiático ha vuelto a recordar su deseo por la reunificación, aunque implique el uso de la fuerza. 

La posibilidad de un conflicto internacional entre los dos países asiáticos existe. Para suavizar posturas, Estados Unidos recuerda que el mundo se enfrenta ya a bastantes escenarios complejos y necesita incluso de los 24 millones de habitantes de Taiwan para enfrentar los retos globales. 

La última referencia a Taiwan antes de este último momento de tensión fue del propio presidente chino, Xi Jinping, el pasado 9 de octubre: "Quienes olvidan su herencia, traicionan a su patria y buscan dividir el país no tendrán un buen final". Las tensiones entre los dos frentes son constantes a lo largo del tiempo. 

Antes de esas declaraciones, China ya había enviado 150 aviones de combate a sobrevolar la isla. Taiwan ha advertido de las catastróficas consecuencias que podría traer que Taipei caiga en las manos de China. Estados Unidos reconoció a China en 1979 pero desde entonces ha mantenido también con la isla una “estrategia política ambigua”. La legislación estadounidense marca que el país debe preservar y promover una extensa, cercana y amistosa relación comercial y cultural con el pueblo de Taiwan.