Boricuas alzan la voz durante el primer día del DNC
Los manifestantes pidieron al presidente Barack Obama la liberación de Óscar López Rivera, un nacionalista puertorriqueño que ha estado detenido en una prisión…
Incluso con el calor sofocante que se sintió el lunes 25 de julio, la gente salió a Thomas Paine Plaza, frente a City Hall, para participar en un día de acción por Puerto Rico.
Organizado por “PA for Puerto Rico”, el evento espera continuar situando el tema de Puerto Rico en la agenda nacional política y social.
Con todos los ojos puestos en Filadelfia debido al comienzo de la Convención Nacional Democrática, los organizadores pensaron que era una gran oportunidad. El lunes fue también día de la Constitución de Puerto Rico.
Una gran multitud se reunió para escuchar a los líderes puertorriqueños hablar en favor de cambiar el estatus político actual de la isla, lo que le impide tomar medidas por su cuenta para afrontar la crisis de la deuda a la que se enfrenta el país en la actualidad.
Junto con los oradores principales, que incluyeron al secretario de Estado de Pensilvania, Pedro Cortés, y a Nilda Ruiz, CEO de la Asociación de Puertorriqueños en Marcha, se realizó una marcha que rodeó City Hall.
Los manifestantes pidieron al presidente Barack Obama la liberación de Óscar López Rivera, un nacionalista puertorriqueño que ha estado detenido en una prisión federal desde los años 80, acusado de conspiración por su participación en las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional.
“Hoy es un día para la unidad de Puerto Rico”, dijo la concejal María Quiñones-Sánchez. “Queríamos dar la bienvenida a todos los delegados que están aquí por la Convención Democrata y a nuestros hermanos y hermanas puertorriqueños que han llegado a nosotros de todo el país”.
Quiñones-Sánchez explicó que el evento tenía dos objetivos. En primer lugar, mostrar a los espectadores que las personas de múltiples orígenes y posiciones políticas pueden unirse para ponerse de acuerdo en algo, el futuro de Puerto Rico. En segundo lugar, llamar a Obama a tomar medidas para liberar a Rivera.
“Estamos aquí unidos”, dijo Quiñones-Sánchez. “Necesitamos que nuestros candidatos presten atención y vea que es lo que estamos pidiendo. Óscar es el último preso político. Su encarcelamiento continuado muestra la hipocresía de los Estados Unidos cuando hablan de democracia y justicia. Usted tiene alguien que ha servido su tiempo y debido al protocolo no van a tomar medidas que lo perdone”.
La atmósfera tenía un aire de revolución puesto que los presentes expresaron su descontento con el gobierno estadounidense sobre la situación política y económica de Puerto Rico.
También estuvo presente Danny Rivera, compositor y cantante puertorriqueño. Rivera es conocido por su activismo político y por llamar a la independencia de Puerto Rico.
“Este es otro capítulo en nuestra misión de imponer una resistencia al hecho de que hemos sido una colonia de Estados Unidos desde tomó poder”, dijo Rivera. “Desde que invadió la isla, muchos puertorriqueños han muerto a causa de la política de colonialismo que los EE.UU. nos ha impuesto”.
Rivera dijo que no estaba presente representando a un partido. En su lugar, dijo que estaba allí como un “ciudadano libre” abogando por un cambio de pensamiento al tratarse de la isla. A través de su cultura y de la canción, Rivera dijo que espera ver algún día un despertar cultural en el pueblo puertorriqueño, en el que se den cuenta de que hay que luchar por sí mismos y por la isla.
“Es una identidad que siempre he llevado conmigo”, dijo Rivera. “Una que espero que todos los puertorriqueños llevarán algún día. Para no solo estar orgullosos de quienes somos, sino también de dónde venimos y defenderla”.
Rivera dijo que es importante entender que en este punto, el futuro de Puerto Rico está ligado a EE.UU. Sería difícil separar a ambos después de que generaciones de puertorriqueños han crecido como estadounidenses.
“Entiendo el deseo de mantener una relación fraternal con Estados Unidos, pero tienen que entender que tenemos el derecho de exigir la liberación del pueblo de Puerto Rico y la descolonización. Sé que va a tomar mucho tiempo y mucho trabajo. Pero todo comienza eliminando el colonialismo que vive colectivamente en todos los puertorriqueños. El de la identidad. Para mí, esta es la mejor oportunidad que hemos tenido en mucho tiempo para traer de vuelta nuestra identidad”, dijo Rivera.
Puerto Rico debe más de $70 mil millones en deuda y su gobierno ha dicho que no podrá pagar. Como tal, casi un año después de los valores predeterminados, el Congreso aprobó la ley “Puerto Rico Oversight, Management and Economic Stability Act”, también conocido como Promesa. Esta ley establece una junta de control fiscal que espera reestructurar y pagar la deuda.
Sin embargo, muchos puertorriqueños están en contra de la legislación, ya que la consideran como una continuación hacia la ideología de colonialismo al que, según los asistentes, la isla se ha enfrentado bajo el gobierno de EE.UU. La actual crisis financiera ha vigorizado la cuestión de la identidad puertorriqueña y la situación política. Muchos boricuas creen que esto es finalmente una oportunidad para cambiar el estatus de la isla debido a la gravedad de la crisis.
DEJE UN COMENTARIO:
¡Únete a la discusión! Deja un comentario.