La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) vuelve a pedir al Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en una carta enviada el 6 de septiembre, que cierre más centros de detención de inmigrantes, incluido el centro de detención del condado de Torrance en Estancia, Nuevo México. 

"Aunque apreciamos que el DHS haya cerrado desde entonces un puñado de instalaciones, se debe hacer mucho más para reducir la detención y frenar el despilfarro del gobierno que beneficia abrumadoramente a las corporaciones penitenciarias privadas. Le escribimos hoy para instarle a que avance cerrando más centros de detención del ICE, sin más demora". Las terribles condiciones de los centros de detención del ICE -incluidas las condiciones que han seguido deteriorándose durante su mandato como Secretario- justifican el cierre inmediato", dice la carta. 

El director de Política Federal, Christopher Anders, y la asesora legislativa principal, Naureen Shah, señalaron a Torrance como ejemplo de un centro de detención que no se gestiona adecuadamente y que somete a sus detenidos a condiciones horribles. 

"También le instamos a cerrar el Centro Residencial Familiar del Sur de Texas en Dilley, Texas, el Centro Residencial del Condado de Karnes y el Centro Residencial Familiar de Berks, donde los residentes, incluyendo mujeres y niños pequeños, han sufrido abusos sexuales y negligencia médica. A la luz de su historial de abusos, estas instalaciones no deberían permanecer abiertas de ninguna manera - y no deberían mantenerse en espera en caso de que una administración posterior intente utilizarlas para la detención a gran escala de familias", decía la carta. 

Además de las horribles condiciones, también señalaron el reciente suicidio en Torrance de un solicitante de asilo brasileño, Kesley Vial. La Oficina del Inspector General del DHS también publicó un informe el pasado mes de marzo en el que documentaba con fotografías las condiciones de vida de los detenidos. Esto incluye la falta de personal, las terribles condiciones de las celdas y la falta de atención médica básica. 

"Torrance tiene una escasez crítica de personal, lo que ha impedido que el centro cumpla con los requisitos contractuales que garantizan que los detenidos residan en un entorno seguro, protegido y humano. Recomendamos la reubicación inmediata de todos los detenidos del centro, a menos y hasta que el centro garantice una dotación de personal adecuada y unas condiciones de vida apropiadas", decía la carta.

"Sin embargo, Torrance ha permanecido abierto y las condiciones atroces persisten - mientras CoreCivic, su operador privado, sigue beneficiándose de este contrato del ICE. De hecho, el ICE detiene a cuatro de cada cinco personas en instalaciones que son propiedad de empresas penitenciarias privadas o que están gestionadas por ellas, según nuestro análisis más reciente", continuaba.

No es la primera vez que la ACLU pregunta al DHS sobre la cuestión del cierre de los centros de detención. Ya en 2021, la organización pidió al jefe del DHS que cerrara primero 39 de las peores y más infames instalaciones. Mayorkas sólo cerró dos de ellos. En mayo de 2021, anunció que él y su administración revisarían y supervisarían continuamente el estado y las condiciones de los centros de detención. 

"Tenemos la obligación de realizar mejoras duraderas en nuestro sistema de detención civil de inmigrantes - Esto marca un primer paso importante para realizar ese objetivo. Los centros de detención del DHS y el tratamiento de las personas en esos centros se someterán a nuestras normas de salud y seguridad. Si descubrimos que se quedan cortos, seguiremos actuando como lo estamos haciendo hoy", dijo Mayorkas.