No hay mejor manera de ilustrar el crecimiento y desarrollo de esta empresa que viendo la transformación de su producto impreso.

En sus primeros años, el semanario AL DÍA pasó de ser una publicación a dos tintas y tres columnas, a inyectar color en sus portadas, siempre con el foco puesto sobre las historias de la comunidad Latina en Philadelphia.

En un intento de reinventarse con la llegada del nuevo siglo, AL DÍA comenzaba a mutar hacían una versión más estilizada, con impresión de alta calidad, así como una nueva identidad de logo.

AL DÍA comenzaba su transición hacia una publicación con un foco más amplio, arrojando luz sobre asuntos nacionales, identitarios y culturales.

AL DÍA es ahora una revista más que un semanario, y su contenido crítico y analítico le pone en una nueva categoría de publicaciones. Es en este período en el que comienza oficialmente su transición hacia un medio completamente bilingüe.

Con un nuevo soporte digital, AL DÍA se ha transformado en una publicación única en su estilo, siendo una de las pocas enfocadas en documentar lo mejor de la experiencia Latino Americana en EE.UU., con un foco “glocal”, y con la mira puesta en la nueva generación de líderes.

Desde su primer computador en 1993, AL DÍA se ha preocupado por mantenerse a la par de la evolución tecnológica, no sólo en términos de equipos sino de estrategias y plataformas.