Los problemas de engordar tras dejar de fumar
Un estudio defiende que dejar de fumar aumenta el riesgo de padecer diabetes tipo 2.
Dejar de fumar es una tarea complicada, que exige muchas ganas y dedicación por parte de la persona involucrada. Durante el proceso, la falta de nicotina genera problemas de ansiedad y puede crear un estado de nerviosismo continuo que acompañará a la persona durante las primeras semanas.
Engordar entre tres y cinco años
CONTENIDO RELACIONADO
Una de las consecuencias más comunes de dejar de fumar y que sufren muchas personas, es el aumento del peso. Según los especialistas, es habitual que la persona que deja el tabaco engorde entre tres y cinco kilos en años siguientes a abandonar este hábito. Hasta ahora y a tenor de los estudios realizados, los expertos señalaban que los perjuicios del tabaco eran sin duda mayores que los que podrían general el aumento de peso. Sin embargo, un nuevo estudio de la Escuela Chan de Salud Pública de Harvard ha desvelado que dejar de fumar aumenta la probabilidad de padecer diabetes tipo 2.
No se trata de una consecuencia del cambio de hábito sino del incremento de peso asociado al mismo. Según los investigadores, cuanto más se incremente el peso tras dejar de fumar, mayor será el riesgo de padecer diabetes. Es por ello que recomiendan a las personas que dejan de fumar que controlen el aumento de peso, con el fin de minimizar el riesgo de sufrir esta enfermedad.
De acuerdo a esta investigación, los exfumadores tienen un 22 por ciento más posibilidades de desarrollar diabetes, sobre todo pasados cinco años después de haber dejado el tabaco. Una vez superado este momento, el riesgo de diabetes baja de manera constante, gracias a haber abandonado el hábito del consumo de tabaco.
DEJE UN COMENTARIO:
¡Únete a la discusión! Deja un comentario.