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Fotos: Celia Esquivel, Carlos Oliveros y Daniel Stamatis.
Fotos: Celia Esquivel, Carlos Oliveros y Daniel Stamatis. 

Latinos en Wuhan, el epicentro del coronavirus

¿Quiénes son los latinos que están en Wuhan y cómo están?

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Wuhan, origen de la epidemia de coronavirus que preocupa a todo el planeta, es un centro comercial en China, por lo cual es un lugar con un alto nivel de multiculturalidad. Si bien la población latina en esta ciudad es pequeña, existe.

Aquí les contamos de tres latinos en Wuhan: una guatemalteca, un colombiano y un mexicano.

Celia Esquivel Salguero – Guatemalteca

Tomado de nomada.gt Foto: Celia Esquivel

Celia Esquivel es originaria de El Progreso, Jutiapa, en el sur-oriente de Guatemala. Desde hace nueve años vive en Wuhan con su esposo y su hijo. Según comentó al medio investigativo Nómada, ella y su hijo son los únicos guatemaltecos en la región. Y como Guatemala no tiene relaciones con la República Popular China, está registrada en la embajada guatemalteca en Taiwán que, hasta el momento en que salió su perfil en Nómada, no se había comunicado con ella.

Para lo que la embajada guatemalteca sí la tiene presente es para engrosar la lista de méritos de los compatriotas, pues Celia es la primera guatemalteca en haber conseguido sus títulos de licenciatura y maestría en China Continental, y las más altas certificaciones en chino avaladas por el gobierno.

Con relación al estado de alerta y tensión que se vive, Celia comenta que es equivalente al estado de guerra: “En el centro de la ciudad de Wuhan, en la Calle Peatonal de Jianghan, la parte más comercial y de más movilidad de la ciudad no hay ninguna persona”.

Aún así, dice que los supermercados están llenos de gente y a todos a la entrada les miden la temperatura, para poder descartar posibles casos de contagio. Se siente tranquila porque le parece claro que todos han colaborado al máximo para contener la epidemia y eso es una garantía de seguridad para todos.

Con franco estoicismo, resalta lo volcada que es la cultura china a trabajar por el bien común: “En esta ocasión, la razón por la que Wuhan fue aislada del resto del país también fue pensando en el bien común, el del resto de los residentes chinos. El gobierno ha ‘sacrificado’ a 11 millones de habitantes por el bien del resto del país; un país que cuenta con 1,400 millones de habitantes. Y esto es algo que me parece muy bien, pensar en el bien común”.

Carlos Oliveros – Colombiano

Tomado de eltiempo.com Foto: Carlos Oliveros

Carlos llegó hace seis meses a la ciudad. Se fue de su nativa bogotá becado para cursar la maestría en Educación Superior de la Universidad Wuhan.

Según Carlos comentó al medio colombiano El Tiempo, es posible que la epidemia ocurriera en un momento relativamente favorable, porque muchas personas habían salido de la ciudad para visitar familiares con motivo de las celebraciones del año nuevo lunar. Y al cerrarse la ciudad, nadie ha vuelto a entrar ni salir, conteniendo la enfermedad.

Carlos y Celia coinciden en que las calles están desiertas, aunque el colombiano profundiza en la dificultad para movilizarse por la ciudad: “Es difícil porque las estaciones de metro están cerradas, ningún medio de transporte funciona, eso —en todo caso— demuestra el compromiso para evitar la propagación”.

Aparte de las calles vacías, sólo es posible ir a los supermercados, así que Carlos pasa los días en su cuarto, a la expectativa de qué medidas nuevas tome el gobierno:

“No siento miedo, no siento pánico, estoy tranquilo. La ciudad está sola, pero eso también es por motivo de las vacaciones del año nuevo chino. Uno se queda con incertidumbre de cómo empieza a evolucionar la cuestión. Hay que tener tranquilidad”.

Por lo pronto, sabe que los colegios están dando clases de manera virtual, ¿tal vez llegue a suceder lo mismo con su universidad? 

Daniel Stamatis – Mexicano

Tomado de bbc.com Foto: Daniel Stamatis

Daniel Stamatis llegó a Wuhan hace cuatro años (lleva siete en China). Actualmente hace un doctorado en arquitectura con bambú en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong. 

Daniel, en su perfil de la BBC, también rescata las calles desiertas, la falta absoluta de transporte público, las mediciones de temperatura a la entrada de los supermercados y la soledad en su habitación estudiantil.

Daniel volvió a Wuhan el 19 de enero, luego de asistir a la celebración de un matrimonio en México. Con ironía, comentaba que si hubiera agendado su vuelvo un par de días más tarde nunca había despegado y había estado a salvo.

Su novia, por una de esas coincidencias que él habría deseado, salió de Wuhan un día antes de que cerraran la ciudad.

Sin embargo, la suerte de Daniel dio un vuelco inesperado.

Hace unos días, cuando se supo que el gobierno estadounidense mandaría aviones a Wuhan para repatriar a su ciudadanos, un amigo mexicano en Indonesia le propuso a Daniel intentar usarlo. Después de todo, desde los seis años él tiene visa americana.

Ante la respuesta cordial pero ineficiente de la embajada, Daniel cambió de estrategia, usó Twitter:

"Me pareció una cosa impresionante, en 10 horas los embajadores contestaron, me llamaron de aquí, de China... Me dijeron que sí puede ser, que lo tendrán en cuenta, que nadie nunca se lo había pedido", dijo Daniel a la BBC.

"Yo no tenía la idea de salir de aquí porque cuando te cierran, te cierran. No hay mucha discusión. Pero si otro país, y sobre todo el vecino del norte, va a mandar aviones, pues yo me voy en el ala, no me importa".

"No estoy desesperado porque de algún modo estoy bien, tengo comida, me siento bien físicamente, no he visto a nadie morirse en la calle... No quiero ni ser fatalista, pero tampoco pendejo. Yo no más digo que no quiero quedarme con los brazos cruzados... Yo no más vi una pequeñísima oportunidad, una pequeñita ventana... donde igual quepo".

El deseo de Daniel se cumplió el 28 de enero, un día después de que la BBC publicara su perfil, pues fue repatriado por el gobierno mexicano.

“El ciudadano mexicano ya está en camino, viene muy pronto y está en perfectas condiciones. No es una situación de un traslado de urgencia”, dijo Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de México, quien también afirmó que los otros mexicanos en la ciudad están tranquilos y prefirieron quedarse.

En contraste con su parte de tranquilidad, el subsecretario también afirmó que el coronavirus llegará tarde o temprano a México, porque no hay ningún mecanismo infalible para contenerlo, pero que el sistema de salud del país estaba listo para afrontarlo.

El miércoles 29 un aeronave americana aterrizó en California desde Wuhan, transportando diplomáticos y ciudadanos americanos. En este momento están en cuarentena voluntaria, tal parece que Daniel se cuenta entre ellos.