Casi pareciera que la densa atmósfera de las llanuras y junglas se hubiera puesto a pinchar música.

Raíz es el segundo EP de Xanducero disponible desde este mes en todas las plataformas. Un proyecto electrónico del solista uruguayo César Corujo publicado por Fértil Disco.

Un viaje sonoro de pistas lentas que convierten la percusión en un paisaje para la meditación y para la introspección en cinco temas como “Siesta en la Ramírez” o “Chacarera de Ciudad Vieja”.

El EP avanza entre texturas electrónicas diseccionando el bombo leguero como si fuera un latino y en general disminuyendo las pulsaciones del oyente como sumergido en un útero de barro y submarinas raíces downtempo y chill out.

“¿Cómo investigar tradiciones musicales que tienen su eje en lo rítmico, como el candombe o la chacarera, desde ciudades que no te dejan pensar?”, se preguntó el solista uruguayo. La respuesta estaba “en la ida y vuelta entre Montevideo y Buenos Aires, entre el cemento y el agua y los árboles”.

Xanducero es el proyecto en solitario de César Corujo, nacido en Uruguay pero que actualmente reside en Montevideo luego de una estancia de once años en Buenos Aires, Argentina. De toda esa experiencia extrajo este disco que combina elementos provenientes de la herencia de raíces africanas, modernidad electrónica o el folclore del Río de la Plata. 

Tuluz fue su debut en el año 2017 con sus primeros singles editado a través del sello argentino Shika Shika. Ya publicó un disco del mismo género en Fértil Discos en el año 2018, igual de relajante pero ligeramente menos latino que la propuesta con la que nos deleita este año.

Las antologías de Fértil Discos de Medio Ambiente o Fina Calma son tan relajantes, tan parecidas a una sesión de mindfulness, que como todo buen catálogo invitan a descubrir el resto de la casa. Encontraremos cuidadas producciones que apuestan por el mestizaje electrónico y la búsqueda de texturas.

Se trata de una asociación y sello autogestionado nacido en Buenos Aires abierto a la producción, promoción y distribución electrónica por todo el continente latino, construyendo una red de artistas de diversas latitudes con muchos puntos en común en el uso de nuevas tecnologías. 

Publican discos en digital y en físico de la talla de El Remolón, Mente Orgánica, Pol Nada o San Ignacio, todas ellas propuestas meditadas para disfrutar interiormente del beat.