La dura cuarentena en Puerto Rico tuvo para muchos artistas isleños una banda sonora tan rítmica como política, el disco debut de Buscabullas Regresa. El dueto formado por los puertorriqueños Raquel Berrios y Luis Alfredo del Valle mezcla electrónica y música tradicional como la jíbara y la bomba con letras llenas de orgullo boricua y mensajes anticoloniales. 

Por eso, porque el arte es resistencia, el colectivo Drag Haus of Vanguardia quiso rendir un tributo virtual a la banda el pasado 19 de junio, que además fue muy especial porque cada intérprete eligió su propia canción del disco y le echó raudales de fantasía a su actuación. 

Un espectáculo que no duró más de media hora pero donde Drag Haus of Vanguardia recorre la isla desde el Viejo San Juan hasta Mayagüez, con mucho humor y sin pelos en la lengua, porque ya pasó el momento de callarse, los puertorriqueños tienen mucho que decir. Sobre todo a unos meses del referéndum de autodeterminación y tras las numerosas tragedias que han azotado la isla. 

En suma, la prueba de que el arte queer, el activismo y los artistas locales tienen no solo el poder de entretener sino de crear en red y alzar la voz. 

"Siento que cosas como esta podrían empezar a hacer ver a la gente que los drag performers son artistas con la misma validez que los grupos indie de la corriente principal o incluso populares. Quiero decir, ¡nuestra Haus es nuestra banda!", le dijo a Remezcla Ana Macho, miembro del colectivo.