Desde que el movimiento Black Lives Matter empezó sus protestas contra el racismo y la violencia policial que se vive en Estados Unidos, muchos artistas de las generaciones más jóvenes han unido sus melodías a este grito popular por una sociedad más justa que repare los daños producidos a las minorías en el pasado -cuyas huellas en el presente son indignantemente obvias-.

Uno de estos artistas valientes es el mexicano Georgel, a cuya apuesta por la música en español deben sumarse sus reivindicaciones LGBT y antirracistas. 

Ahora Georgel, quien sacudió al país con una versión del tema de Juan Gabriel “El Noa Noa”, prepara un nuevo y reivindicativo EP que le ha hecho explorar la potencia del rhythm & blues en español.

"En Estados Unidos le han puesto un lente a una problemática racial que existe en todo el mundo. La diferencia en EE.UU. es que la gente afrodescendiente teme por su vida al salir a la calle, al tomar el tren subirse a la bici... Crees que vives el sueño americano pero para personas afrodescendientes es una tortura continua", le dijo a EFE.

Para Georgel "esta lente (las protestas del BLM) da la oportunidad a las personas de diferentes comunidades oprimidas" para unirse al movimiento, sobre todo en pleno Orgullo LGTB, comunidad a la que el cantante pertenece.

El R&B en español está viviendo una época dorada, sobre todo entre los artistas más jóvenes, que ven en los grandes músicos de los 90 y los 2000, como Stevie Wonder, a quien Georgel escuchaba ya de niño, sus mejores referentes. 

"Desde que empecé mi proyecto empezó el mundo a diversificar géneros. Se siente una corriente fuerte del R&b en español. (...) Ha habido una respuesta padre y público fuerte en México, España, Argentina, Colombia, Chile, Perú... con estas megaciudades se va difuminando por el resto de Latinoamérica. Esta corriente del R&B en español nos ha caído de maravilla", expresó el cantante a EFE.

Su sencillo junto al colombiano Nanpa Básico se titula “Adrenalina”, algo de lo que vamos sobrados en esta época tan convulsa. Sin embargo, Georgel nos anima a redirigirla en una buena y poderosa dirección. 

"Siempre hubo una energía relacionada con esa relación entre querer salir del cuadro y del estereotipo y también nos imaginábamos el mundo en el futuro, que ya en sí el mundo políticamente tiene muchas restricciones, ahora con esto pintaba más restringido. Jugábamos con el concepto de buscar adrenalina", concluyó el artista.